Rhhevoltaire escribió:No no !!!  el cine es el puro reflejo de la realidad.

Porque en realidad, resulta que al final todo es mentira.

Pur escribió:Luego referido al post inicial, si la película está buena, si me gustó, no me interesa la condición económica de los creadores, o de la industria en general (todos los que hicieron posible la película)... por más que la película plantee esa supuesta "contradicción". Así como no espero algo semejante del autor de una novela que me haya gustado. Es como pretender que el director de una película de vampiros sea un vampiro.

Blas escribió:

Pur escribió:Luego referido al post inicial, si la película está buena, si me gustó, no me interesa la condición económica de los creadores, o de la industria en general (todos los que hicieron posible la película)... por más que la película plantee esa supuesta "contradicción". Así como no espero algo semejante del autor de una novela que me haya gustado. Es como pretender que el director de una película de vampiros sea un vampiro.

Abundando en el tema diré que lo mío no era una crítica al cine. Una peli puede ser buena, mala o regular con independencia de su argumento o lo que expresen sus diálogos.
Lo mío era una reflexión sobre los discursos, sobre las ideas, sobre las filosofías, sobre el imperio de la hipocresía humana a cualquier nivel.
Resulta que quienes dan los mensajes, muy frecuentemente son los contrarios a esos mensajes. 
Digamos que el discurso de la oveja lo está pronunciando el lobo y lo asumimos hasta con ternura. La gente viendo la tele se pone blandita oyendo palabras supersolidarias de boca de tipos que no tocarían a un obrero ni con un palo.
Ejemplo: Una peli contra la violencia de género, puede ser magnífica en sí misma, pero yo lo que destaco es que la paradoja estaría en que el director, el guionista y el productor de esa peli fueran machistas misóginos.
Lo que digo es que esas películas tan emocionantes que se han hecho siempre, sobre la miseria en el tercer mundo, los abusos sobre los pobres, las luchas de los obreros contra la opresión, las heroicidades de gente altruista y sacrificada, luego están representadas en la ceremonia de los Oscar, en el festival de Cannes, en el de Berlín, en el de Venecia o en los Goyas por gente a la que le importa una mierda todo eso y que vive en el mayor lujo posible.
Y eso por supuesto es aplicable a cualquier medio de comunicación, a los escritores, famosos y artistas en general, que te meten un discurso humanista de la hostia y acto seguido se largan en un helicóptero a comerse unas langostitas a Mallorca. 

CortoCortito escribió:Bueno el tener un alto nivel de vida no veo que pueda estar reñido con el derecho a la crítica y el manifestarse contrario al sistema que nos gobierna. Normalmente de estas personalidades conocemos la parte frívola sin embargo alguno de ellos como por ejemplo Matt Damon ( de hecho se abrió un hilo ) proclama la desobediencia civil y no es el único que es conocido por su activismo, Oliver Stone, Sean Penn y otros a pesar de su estatus tienen una gran conciencia cívica.

NEROCAESAR escribió:

CortoCortito escribió:Bueno el tener un alto nivel de vida no veo que pueda estar reñido con el derecho a la crítica y el manifestarse contrario al sistema que nos gobierna. Normalmente de estas personalidades conocemos la parte frívola sin embargo alguno de ellos como por ejemplo Matt Damon ( de hecho se abrió un hilo ) proclama la desobediencia civil y no es el único que es conocido por su activismo, Oliver Stone, Sean Penn y otros a pesar de su estatus tienen una gran conciencia cívica.

 Por ejemplo mi nieto; es un arduo defensor de los derechos civiles, y todos sabemos que su fortuna se mide en millones de euros... 
 

Blas escribió:

Pur escribió:Luego referido al post inicial, si la película está buena, si me gustó, no me interesa la condición económica de los creadores, o de la industria en general (todos los que hicieron posible la película)... por más que la película plantee esa supuesta "contradicción". Así como no espero algo semejante del autor de una novela que me haya gustado. Es como pretender que el director de una película de vampiros sea un vampiro.

Abundando en el tema diré que lo mío no era una crítica al cine. Una peli puede ser buena, mala o regular con independencia de su argumento o lo que expresen sus diálogos.
Lo mío era una reflexión sobre los discursos, sobre las ideas, sobre las filosofías, sobre el imperio de la hipocresía humana a cualquier nivel.
Resulta que quienes dan los mensajes, muy frecuentemente son los contrarios a esos mensajes. 
Digamos que el discurso de la oveja lo está pronunciando el lobo y lo asumimos hasta con ternura. La gente viendo la tele se pone blandita oyendo palabras supersolidarias de boca de tipos que no tocarían a un obrero ni con un palo.
Ejemplo: Una peli contra la violencia de género, puede ser magnífica en sí misma, pero yo lo que destaco es que la paradoja estaría en que el director, el guionista y el productor de esa peli fueran machistas misóginos.
Lo que digo es que esas películas tan emocionantes que se han hecho siempre, sobre la miseria en el tercer mundo, los abusos sobre los pobres, las luchas de los obreros contra la opresión, las heroicidades de gente altruista y sacrificada, luego están representadas en la ceremonia de los Oscar, en el festival de Cannes, en el de Berlín, en el de Venecia o en los Goyas por gente a la que le importa una mierda todo eso y que vive en el mayor lujo posible.
Y eso por supuesto es aplicable a cualquier medio de comunicación, a los escritores, famosos y artistas en general, que te meten un discurso humanista de la hostia y acto seguido se largan en un helicóptero a comerse unas langostitas a Mallorca. 

Pur escribió:No lo creo, menos aún en el contexto del cine.

Tatsumaru escribió:Es que les sirve para ser comprometidos con la "realidad", por aquí hay un tipo que es todo fachada, se le nota que no sale del gimnasio durante horas, bronceado de rayos UVa y que se muere por los modelitos, formando un telemaratón solidario repartiendo comida...Para ganarse el respeto de las autoridades locales y quizás obtener alguna contrapartida con el canal de tele local que dirige, ¿van a cerrar un canal de tele solidario cuando tenga deudas o le harán un favor? Creo que también se ha apuntado a la moda de estar indignado contra la política...como el Javier Cárdenas ese. Pero a la vez los políticos de aquí se unen a su campaña de dar comida, no  mejorar a nivel global y trabajar por ello, sino con la compasión con cámaras de televisión presentes.


Para saber más pero en plan de broma por lo que harta el tipo:

http://www.elbaifoilustrado.com/artiles-podria-usar-drones-para-repartir-la-comida-recaudada-en-el-telemaraton/

NEROCAESAR escribió:

Blas escribió:

Pur escribió:Luego referido al post inicial, si la película está buena, si me gustó, no me interesa la condición económica de los creadores, o de la industria en general (todos los que hicieron posible la película)... por más que la película plantee esa supuesta "contradicción". Así como no espero algo semejante del autor de una novela que me haya gustado. Es como pretender que el director de una película de vampiros sea un vampiro.

Abundando en el tema diré que lo mío no era una crítica al cine. Una peli puede ser buena, mala o regular con independencia de su argumento o lo que expresen sus diálogos.
Lo mío era una reflexión sobre los discursos, sobre las ideas, sobre las filosofías, sobre el imperio de la hipocresía humana a cualquier nivel.
Resulta que quienes dan los mensajes, muy frecuentemente son los contrarios a esos mensajes. 
Digamos que el discurso de la oveja lo está pronunciando el lobo y lo asumimos hasta con ternura. La gente viendo la tele se pone blandita oyendo palabras supersolidarias de boca de tipos que no tocarían a un obrero ni con un palo.
Ejemplo: Una peli contra la violencia de género, puede ser magnífica en sí misma, pero yo lo que destaco es que la paradoja estaría en que el director, el guionista y el productor de esa peli fueran machistas misóginos.
Lo que digo es que esas películas tan emocionantes que se han hecho siempre, sobre la miseria en el tercer mundo, los abusos sobre los pobres, las luchas de los obreros contra la opresión, las heroicidades de gente altruista y sacrificada, luego están representadas en la ceremonia de los Oscar, en el festival de Cannes, en el de Berlín, en el de Venecia o en los Goyas por gente a la que le importa una mierda todo eso y que vive en el mayor lujo posible.
Y eso por supuesto es aplicable a cualquier medio de comunicación, a los escritores, famosos y artistas en general, que te meten un discurso humanista de la hostia y acto seguido se largan en un helicóptero a comerse unas langostitas a Mallorca. 

   Vamos a ver: el actor o el director de una película, no está obligado en su vida real a emular al personaje que interpreta o a lo que nos narra en la película que se le ha encargado.

   El cine es un espectáculo y quienes intervienen en él son artistas. Su vida privada, es otra cosa.

CortoCortito escribió:Bueno el tener un alto nivel de vida no veo que pueda estar reñido con el derecho a la crítica y el manifestarse contrario al sistema que nos gobierna. Normalmente de estas personalidades conocemos la parte frívola sin embargo alguno de ellos como por ejemplo Matt Damon ( de hecho se abrió un hilo ) proclama la desobediencia civil y no es el único que es conocido por su activismo, Oliver Stone, Sean Penn y otros a pesar de su estatus tienen una gran conciencia cívica.

Pur escribió:

Blas escribió:

Pur escribió:Luego referido al post inicial, si la película está buena, si me gustó, no me interesa la condición económica de los creadores, o de la industria en general (todos los que hicieron posible la película)... por más que la película plantee esa supuesta "contradicción". Así como no espero algo semejante del autor de una novela que me haya gustado. Es como pretender que el director de una película de vampiros sea un vampiro.

Abundando en el tema diré que lo mío no era una crítica al cine. Una peli puede ser buena, mala o regular con independencia de su argumento o lo que expresen sus diálogos.
Lo mío era una reflexión sobre los discursos, sobre las ideas, sobre las filosofías, sobre el imperio de la hipocresía humana a cualquier nivel.
Resulta que quienes dan los mensajes, muy frecuentemente son los contrarios a esos mensajes. 
Digamos que el discurso de la oveja lo está pronunciando el lobo y lo asumimos hasta con ternura. La gente viendo la tele se pone blandita oyendo palabras supersolidarias de boca de tipos que no tocarían a un obrero ni con un palo.
Ejemplo: Una peli contra la violencia de género, puede ser magnífica en sí misma, pero yo lo que destaco es que la paradoja estaría en que el director, el guionista y el productor de esa peli fueran machistas misóginos.
Lo que digo es que esas películas tan emocionantes que se han hecho siempre, sobre la miseria en el tercer mundo, los abusos sobre los pobres, las luchas de los obreros contra la opresión, las heroicidades de gente altruista y sacrificada, luego están representadas en la ceremonia de los Oscar, en el festival de Cannes, en el de Berlín, en el de Venecia o en los Goyas por gente a la que le importa una mierda todo eso y que vive en el mayor lujo posible.
Y eso por supuesto es aplicable a cualquier medio de comunicación, a los escritores, famosos y artistas en general, que te meten un discurso humanista de la hostia y acto seguido se largan en un helicóptero a comerse unas langostitas a Mallorca. 

Entiendo, desde luego existe hipocresía en varios ámbitos, y la industria cinematográfica no está exenta en absoluto, de hecho es un recurso propagandístico por excelencia, para varios países.

Entendí desde un principio lo que dijiste y por eso respondí lo que respondí, aunque someramente. En mi primer comentario me enfoco pura y exclusivamente en el asunto de los mensajes, ideas o discursos.... cuáles me resultan dañinos en el cine, porque se encargan de reforzar unos valores determinados, desalentando todo aquello que se proclame diferente (este es el modo sutil de educar en valores, que tiene como herramienta efectiva a la industria del cine; son películas que se realizan con ese fin). El segundo comentario va dirigido a tu observación, y en ese sentido discrepo, ya que no hablamos del mensaje, sino de la supuesta incongruencia que propone el hecho de que sus realizadores no vivan acorde a la historia que cuentan o al mensaje que emiten. En estos casos creo que la pretensión de coherencia entre el mensaje y el emisor, es exigible en multitud de ámbitos, donde sus palabras y acciones afectan directamente nuestra vida (por ejemplo, el plano político, el plano religioso, el plano de algunas profesiones como la educación, etc), digamos que hay una pretensión ética mucho mayor, porque la credibilidad en las palabras se apoya en los hechos y aquello es de suma importancia.

El cine, como cualquier otro ámbito artístico, tiene una función donde el mensaje importa más que el emisor, y donde efectivamente la ficción es la protagonista (aún en el genero documental, el realizador es un simple mediador de la realidad, no el protagonista de la misma, por ende no importa cómo viva, sino lo que me esté mostrando -el mensaje en sí mismo es lo que importa).

Sí se puede hacer una crítica al lenguaje, al mensaje o a la idea que impone una película, tanto en términos de la credibilidad, la verosimilitud, la ética, la coherencia, la congruencia... pero nada de esto se establece en virtud del modo de vida de sus realizadores. El mensaje de una película que enaltece el maltrato por ejemplo, no es menos criticable porque su director sea un maltratador. Si en nuestra crítica restamos peso a la parte perjudicial que tiene ese mensaje, por el sólo hecho de que resulta coherente con la vida de su realizador, estamos rescatando el valor equivocado.

Otra cosa que me gustaría matizar, ya que hablamos de cine y de realidad, es la posibilidad de profundizar en ciertos conceptos que participan en tu reflexión y en la respuesta de Rehvoltaire, y ver si podemos lograr diferenciarlos; los conceptos de realidad, mentira, falsedad y ficción.

Saludos.

Blas escribió:

CortoCortito escribió:Bueno el tener un alto nivel de vida no veo que pueda estar reñido con el derecho a la crítica y el manifestarse contrario al sistema que nos gobierna. Normalmente de estas personalidades conocemos la parte frívola sin embargo alguno de ellos como por ejemplo Matt Damon ( de hecho se abrió un hilo ) proclama la desobediencia civil y no es el único que es conocido por su activismo, Oliver Stone, Sean Penn y otros a pesar de su estatus tienen una gran conciencia cívica.

Los famosos son individuos y por tanto cada uno será cada uno. OK.
Pero, por eso mismo, también los hay y muchos que ya te cagas. En cuatrocientas mil campañas electorales hemos visto comunistas de salón a puntapala, ¿o no?
A mí si un tío megamillonario dona no sé qué cifra anualmente a la asociación de niños tuberculosos de guatemalísima, me la rebufa: dime qué porcentaje de tus bienes donas y entonces hablamos de si eres un tío guay o un puto fantasma.
El centro de todo mi mensaje en este hilo es el fantasmismo aceptado como bondad. Y tenemos una especie de reverencia subconsciente acera de los artistas y famosos que a mí no me convence. (no lo digo por ti, que no te conozco, me refiero en general, a la sociedad)

CortoCortito escribió:

Blas escribió:

CortoCortito escribió:Bueno el tener un alto nivel de vida no veo que pueda estar reñido con el derecho a la crítica y el manifestarse contrario al sistema que nos gobierna. Normalmente de estas personalidades conocemos la parte frívola sin embargo alguno de ellos como por ejemplo Matt Damon ( de hecho se abrió un hilo ) proclama la desobediencia civil y no es el único que es conocido por su activismo, Oliver Stone, Sean Penn y otros a pesar de su estatus tienen una gran conciencia cívica.

Los famosos son individuos y por tanto cada uno será cada uno. OK.
Pero, por eso mismo, también los hay y muchos que ya te cagas. En cuatrocientas mil campañas electorales hemos visto comunistas de salón a puntapala, ¿o no?
A mí si un tío megamillonario dona no sé qué cifra anualmente a la asociación de niños tuberculosos de guatemalísima, me la rebufa: dime qué porcentaje de tus bienes donas y entonces hablamos de si eres un tío guay o un puto fantasma.
El centro de todo mi mensaje en este hilo es el fantasmismo aceptado como bondad. Y tenemos una especie de reverencia subconsciente acera de los artistas y famosos que a mí no me convence. (no lo digo por ti, que no te conozco, me refiero en general, a la sociedad)

Hombre yo aparte del culo de Halle Berry, bueno casi toda ella en general, me interesa poco el famoseo, eso si no dejo de reconocer que como cualquier otro tienen su derecho a posicionarse sea su pose más o menos sincera.
En cuanto al fantasmismo, es algo que en mayor o menor medida todos practicamos, yo realmente no soy el tipo de mi avatar, realmente soy Sor Apapusia del convento de clarisas de Alpedrete.

Blas escribió:

NEROCAESAR escribió:

Blas escribió:

Pur escribió:Luego referido al post inicial, si la película está buena, si me gustó, no me interesa la condición económica de los creadores, o de la industria en general (todos los que hicieron posible la película)... por más que la película plantee esa supuesta "contradicción". Así como no espero algo semejante del autor de una novela que me haya gustado. Es como pretender que el director de una película de vampiros sea un vampiro.

Abundando en el tema diré que lo mío no era una crítica al cine. Una peli puede ser buena, mala o regular con independencia de su argumento o lo que expresen sus diálogos.
Lo mío era una reflexión sobre los discursos, sobre las ideas, sobre las filosofías, sobre el imperio de la hipocresía humana a cualquier nivel.
Resulta que quienes dan los mensajes, muy frecuentemente son los contrarios a esos mensajes. 
Digamos que el discurso de la oveja lo está pronunciando el lobo y lo asumimos hasta con ternura. La gente viendo la tele se pone blandita oyendo palabras supersolidarias de boca de tipos que no tocarían a un obrero ni con un palo.
Ejemplo: Una peli contra la violencia de género, puede ser magnífica en sí misma, pero yo lo que destaco es que la paradoja estaría en que el director, el guionista y el productor de esa peli fueran machistas misóginos.
Lo que digo es que esas películas tan emocionantes que se han hecho siempre, sobre la miseria en el tercer mundo, los abusos sobre los pobres, las luchas de los obreros contra la opresión, las heroicidades de gente altruista y sacrificada, luego están representadas en la ceremonia de los Oscar, en el festival de Cannes, en el de Berlín, en el de Venecia o en los Goyas por gente a la que le importa una mierda todo eso y que vive en el mayor lujo posible.
Y eso por supuesto es aplicable a cualquier medio de comunicación, a los escritores, famosos y artistas en general, que te meten un discurso humanista de la hostia y acto seguido se largan en un helicóptero a comerse unas langostitas a Mallorca. 

   Vamos a ver: el actor o el director de una película, no está obligado en su vida real a emular al personaje que interpreta o a lo que nos narra en la película que se le ha encargado.

   El cine es un espectáculo y quienes intervienen en él son artistas. Su vida privada, es otra cosa.

Si eso ya lo entiendo. Un actor solo declama un texto. Y como es un trabajo, un día dirá algo con lo que casualmente coincida y otro día lo contrario.
Yo, resumiendo, destacaba lo grotesco de que los mensajes "populares" "solidarios" y "buenrollistas" te los esté dando precisamente la puta INDUSTRIA.

CortoCortito escribió:

Blas escribió:

CortoCortito escribió:Bueno el tener un alto nivel de vida no veo que pueda estar reñido con el derecho a la crítica y el manifestarse contrario al sistema que nos gobierna. Normalmente de estas personalidades conocemos la parte frívola sin embargo alguno de ellos como por ejemplo Matt Damon ( de hecho se abrió un hilo ) proclama la desobediencia civil y no es el único que es conocido por su activismo, Oliver Stone, Sean Penn y otros a pesar de su estatus tienen una gran conciencia cívica.

Los famosos son individuos y por tanto cada uno será cada uno. OK.
Pero, por eso mismo, también los hay y muchos que ya te cagas. En cuatrocientas mil campañas electorales hemos visto comunistas de salón a puntapala, ¿o no?
A mí si un tío megamillonario dona no sé qué cifra anualmente a la asociación de niños tuberculosos de guatemalísima, me la rebufa: dime qué porcentaje de tus bienes donas y entonces hablamos de si eres un tío guay o un puto fantasma.
El centro de todo mi mensaje en este hilo es el fantasmismo aceptado como bondad. Y tenemos una especie de reverencia subconsciente acera de los artistas y famosos que a mí no me convence. (no lo digo por ti, que no te conozco, me refiero en general, a la sociedad)

Hombre yo aparte del culo de Halle Berry, bueno casi toda ella en general, me interesa poco el famoseo, eso si no dejo de reconocer que como cualquier otro tienen su derecho a posicionarse sea su pose más o menos sincera.
En cuanto al fantasmismo, es algo que en mayor o menor medida todos practicamos, yo realmente no soy el tipo de mi avatar, realmente soy Sor Apapusia del convento de clarisas de Alpedrete.

NEROCAESAR escribió:

Blas escribió:

NEROCAESAR escribió:

Blas escribió:

Pur escribió:Luego referido al post inicial, si la película está buena, si me gustó, no me interesa la condición económica de los creadores, o de la industria en general (todos los que hicieron posible la película)... por más que la película plantee esa supuesta "contradicción". Así como no espero algo semejante del autor de una novela que me haya gustado. Es como pretender que el director de una película de vampiros sea un vampiro.

Abundando en el tema diré que lo mío no era una crítica al cine. Una peli puede ser buena, mala o regular con independencia de su argumento o lo que expresen sus diálogos.
Lo mío era una reflexión sobre los discursos, sobre las ideas, sobre las filosofías, sobre el imperio de la hipocresía humana a cualquier nivel.
Resulta que quienes dan los mensajes, muy frecuentemente son los contrarios a esos mensajes. 
Digamos que el discurso de la oveja lo está pronunciando el lobo y lo asumimos hasta con ternura. La gente viendo la tele se pone blandita oyendo palabras supersolidarias de boca de tipos que no tocarían a un obrero ni con un palo.
Ejemplo: Una peli contra la violencia de género, puede ser magnífica en sí misma, pero yo lo que destaco es que la paradoja estaría en que el director, el guionista y el productor de esa peli fueran machistas misóginos.
Lo que digo es que esas películas tan emocionantes que se han hecho siempre, sobre la miseria en el tercer mundo, los abusos sobre los pobres, las luchas de los obreros contra la opresión, las heroicidades de gente altruista y sacrificada, luego están representadas en la ceremonia de los Oscar, en el festival de Cannes, en el de Berlín, en el de Venecia o en los Goyas por gente a la que le importa una mierda todo eso y que vive en el mayor lujo posible.
Y eso por supuesto es aplicable a cualquier medio de comunicación, a los escritores, famosos y artistas en general, que te meten un discurso humanista de la hostia y acto seguido se largan en un helicóptero a comerse unas langostitas a Mallorca. 

   Vamos a ver: el actor o el director de una película, no está obligado en su vida real a emular al personaje que interpreta o a lo que nos narra en la película que se le ha encargado.

   El cine es un espectáculo y quienes intervienen en él son artistas. Su vida privada, es otra cosa.

Si eso ya lo entiendo. Un actor solo declama un texto. Y como es un trabajo, un día dirá algo con lo que casualmente coincida y otro día lo contrario.
Yo, resumiendo, destacaba lo grotesco de que los mensajes "populares" "solidarios" y "buenrollistas" te los esté dando precisamente la puta INDUSTRIA.

  A lo mejor habría que definir "la puta industria". En principio, la industria en Occidente es un valor, mueve dinero y crea prosperidad...; otra cosa es que se abuse de ello.