Ya hemos dicho algunos aquí las similitudes que existen entre la religión, basada en la creencia de la existencia de un Dios, y el sistema económico actual, neoliberal, basado en un Dios más poderoso aún, que es el dinero (a estas alturas, también intangible) que mueve el mundo. Las similitudes son innegables desde el momento en que advertimos que ambos se sostienen en la necesidad de permanencia; las guerras son la máxima expresión de un mundo que se debate religiosamente entre la dominación y la liberación.

Así como occidente ha dado un salto enorme en el paradigma de pensamiento, dejando atrás las fórmulas de la metafísica y reemplazándolas por las fórmulas de la razón, nuevamente ha caído en la trampa de la constitución humana que pugnará siempre por dejar salir todo lo que de metafísico existe en ella otorgándonos consistencia subjetiva. De tal forma, un mundo pragmático, objetivo, lógico y racional, necesita de la fe ciega para que tal sistema se sostenga.

Es así como las Instituciones de la razón (la Educación, La Justicia, los Gobiernos, los Organismos Internacionales, Los departamentos de defensa, los organismos e Instituciones de la economía) deben contar con la complicidad de una mayoría de comunes mortales (aún de los que se oponen de manera particular en lo tocante a algunas de todas estas instancias). Complicidad que no es otra cosa que la creencia (irracional, metafísica) de que hay algo más allá de nuestro alcance, que nos organiza y nos garantiza un orden, y que de no existir, todo sería caótico; el dinero, o un Dios, o "el mercado".

Sin embargo hay algunas diferencias sustanciales, que vienen dadas ya no por el fin sino por fuerza del propio medio... todo aquello que bucea en el universo metafísico (lo teórico, lo subjetivo, lo simbólico) reposa en lo ilimitado, en la intuición de lo infinito, sin cimientos materiales que se le interpongan, por ende otorga un margen para concebir al menos la idea de libertad, a aquellos que por la naturaleza misma del ser humano, hacen uso de la capacidad de transgresión. En efecto la amenaza del castigo frente al pecado con la cual la religión conserva el orden, es suplida, en el sistema económico neoliberal, por una instancia mucho más racional y objetiva, que indica que, de no dedicar parte de tu vida a ganar dinero, quedar fuera de él es, ya no una posibilidad (elemento primordial de la amenaza) sino un hecho factible... La amenaza se convierte en advertencia y la libertad se esfuma.

Es curioso que el sistema económico neoliberal se aferre con tanto tesón al término "libertad" en variadas instancias del discurso... generando en nosotros una idea de posibilidades de elección que no es tal, edificando el imaginario de progreso ilimitado que tampoco es tal, y no lo es porque todo ese sistema está construido en el terreno de lo material y lo físico.

La mano invisible del mercado es la máxima de quienes tienen la fe ciega de que algo superior e intangible (no material, metafísico, abstracto como un Dios) debe ordenar y organizar las sociedades humanas sin intervención alguna. En el discurso de estas personas, en sus sermones, existe un diablo que es el "Estado", al cual le otorgan (para propia comodidad del discurso, cual lecho de Procusto) una entidad igualmente abstracta... porque de advertir que el Estado es ese concepto moderno que nace bajo el paradigma racional (en oposición a la Iglesia como sede de la Divina Providencia que organizaba el mundo), y de reconocer que nace como una construcción regida por la voluntad humana, llegaríamos a la notable conclusión de que los defensores del neoliberalismo están declarando la necesidad de que la voluntad (y la razón) humana no intervengan en los destinos de las sociedades, porque para eso está la mano invisible del mercado.

¿Existe acaso una explicación más clara del por qué las democracias están en crisis?.

Así como el hombre buscó y busca liberarse de los sistemas de creencia cerrados de la religión, y trasgredir a pesar de las amenazas del castigo, haciendo uso de una razón que lo lleve a cuestionar la existencia de un paraíso y de un infierno (opciones, estas dos, entre las cuales debe elegir), así mismo muchos otros buscan liberarse de este nuevo orden de creencias, haciendo uso de la misma razón, que lo lleve a determinar cuánto de invisible tiene esa mano del mercado, y si no es acaso otra falacia para pervertir la razón misma que, así como le dio nacimiento, le dará defunción.

Yo creo que este situacion se repite desde que el hombre sedentario, no ha cambiado nada, simplemente  la mano invisible que mece la cuna es la de las emociones, y la mano invisible del poder, codicia y ambicion.

Una buena síntesis, de hecho todo esto que escribí fue luego de leer el Capítulo V "La transgresión" del libro de George Bataille "El erotismo", que habla acerca del carácter ilógico de la prohibición (que según él tiene su punto inicial en la muerte -el no matarás-) y claramente expuesto en la aceptación de las guerras.

En una parte dice:

"Tal es la naturaleza del tabú: hace posible un mundo sosegado y razonable, pero, en su principio, es a la vez un estremecimiento que no se impone a la inteligencia, sino a la sensibilidad; tal como lo hace la violencia misma (la violencia humana no es esencialmente efecto de un cálculo, sino de estados sensibles como la cólera, el miedo, el deseo...). Debemos tener en cuenta el carácter irracional que tienen las prohibiciones si es que queremos comprender que sigan ligadas a una cierta indiferencia para con la lógica."

http://magistermediales.files.wordpress.com/2011/05/el-erotismo-georges-bataille1.pdf

¿Otra vez coinciodes conmigo?  te vas a sobre-excitar

Antisozzial escribió:¿Otra vez coinciodes conmigo?  te vas a sobre-excitar

mmm depende cuánto haya en el sobre, me puedo excitar o me puedo enfriar

Ademas fijate, yo que ultiamente al estar el foro de anarkia, me he dedicado a leer un poco por encima la filosofia anarkista, al final todo radica en el poder, las revoluciones solo son una excusa para obtener el poderm quitar a unos para poner a otros

Antisozzial escribió:Ademas fijate, yo que ultiamente al estar el foro de anarkia, me he dedicado a leer un poco por encima la filosofia anarkista, al final todo radica en el poder, las revoluciones solo son una excusa para obtener el poderm quitar a unos para poner a otros

Si, el poder es entonces todo aquello que está guiado por lo emocional y no por lo racional (inclusive el propio poder, el individual, puede ser una sensación más que una realidad basada en recursos materiales). La revolución transgrede el orden impuesto, y tal vez esa dinámica es la que garantice la evolución (el cambio)... aunque sólo implique que el poder esté cambiando permanentemente de manos.

Tal vez la emoción viene a ser la cura y la enfermedad.

Si, como el amor y el odio

Antisozzial escribió:Si, como el amor y el odio

Que con tanta facilidad se ancla a conceptos tales como el bien y el mal (para crear nuevos motivos justificadores de cierto orden de cosas). Se puede decir que el pensamiento racional no puede opacar la potencia de las emociones (las pasiones)... y me pregunto si la tecnología, que carece por completo de emociones, no será ese paso que nos saque del meollo... no hablo de la creación de robots o inteligencia artificial, digo que a medida que avanza el paradigma tecnológico, nosotros comenzamos a tener un pensamiento tecnológico (que va más allá del pensamiento lógico matemático), y me pregunto si llegará un momento en que ese tipo de pensamiento rompa definitivamente con la paradoja del dualismo.

Me fui a la mierda ¿no?

Me gusta este hilo, simplemente por que yo resumiria tu refelxion en esta frase  siempre ha ido mal, pero lo mejor de todo es que siempre ira mal, no hay nada que hacer y la gente no se da cuenta y aunque es cruel es a la vez divertido, al menos visto desde un punto objetivo

Antisozzial escribió:Me gusta este hilo, simplemente por que yo resumiria tu refelxion en esta frase  siempre ha ido mal, pero lo mejor de todo es que siempre ira mal, no hay nada que hacer y la gente no se da cuenta y aunque es cruel es a la vez divertido, al menos visto desde un punto objetivo

No lo considero cruel ni divertido (o si, según se mire), sino necesario.