Se le conoce como El Vacié, y está en la maravillosa ciudad de Sevilla, pero hoy no voy a escribir sobre él, aunque sí de su nombre, pues es el adoptado por un elenco de mujeres, todas gitanas, analfabetas, capaces de subirse a un teatro y escenificar una de las mejores obras teatrales de los últimos tiempos, escrita por el gran granadino universal Federico García Lorca, se trata de “La Casa de Bernarda Alba”.

El éxito a El Vacié le viene desde hace unos diez años y ha estrenado también fuera de las fronteras españolas, como Rotterdam.

Rocío Montero Alba (en la foto que acompaño) interpreta la madre en el drama, la Bernarda Alba, es en su vida particular madre de siete hijos y vecina de El Vacié al igual que las otras mujeres que compone este elenco; nunca habían oído hablar del poeta granadino, ni habían subido a un escenario. La tremenda energía de estas mujeres y el arte para transmitirla, hacen de la obra lorquiana una de las mejores interpretaciones que se conoce, incluso en palabras de Laura, sobrina del martirizado autor “la más lorquiana que he conocido”, y no le falta razón.

El próximo día 7 de marzo tendré, nuevamente, la oportunidad de verlas, esta vez en mi ciudad, Alacant, en el Teatro Arniches. Volveré a gozar nuevamente del texto lorquiano y de la fuerza desgarradora de Rocío Montero y de Carmen, Lole, Carina, Sandra, Ana, Sonia Jana, Isabel, Pilar, Marga y Bea, sus compañeras.


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