Esta es la noticia y ustedes juzguen:

Un ciudadano de Orihuela tiene una vivienda en venta, por 250.000 euros. Recibe una propuesta de compra de unos extranjeros que, según él le parecieron italianos.

La propuesta es la siguiente: Como han de comprarla con dinero negro, para blanquearlo deben el vendedor entrevistarse en Tolouse (Francia) y llevar hasta allí 250.000 euros en billetes pequeños. Los compradores le entregarán 250.000 euros en billetes de 500, más 25.000 euros como regalo. Una vez en España lo visitarán y harán la compra con dinero ya blanco y en una Notaría.

Este señor, bastante imbécil, inocente o egoísta, ante la propuesta de ganarse 25.000 euros se desplaza a la ciudad francesa. Se entrevistan en un hotel para hacer el cambio, y uno a uno cuenta y revisa los billetes de 500 euros que le entregan: 275.000 euros. Al mismo tiempo los "compradores" hacen lo mismo con sus 250.000 euros en billetes pequeños. Hablan sobre la visita a Orihuela para realizar la compra, toman unos vinos y se despiden.

No hace falta que les diga más ¿verdad? El paquete de billetes de 500 euros fue hábilmente cambiado por otro con billetes falsos, más bien papeles impresos como si lo fueran.

Y el imbécil lo denuncia en Comisaría, pues de esta gente ha perdido todo rastro. Es el viejo timo de la estampita pero a lo grande y a lo moderno.

Si tiene que declarar ante un Juez, deberá reconocer que intentaba ser cómplice de blanqueo de dinero: un delito. Si llega a detectarlo la policía en la frontera hubiese tenido problemas, y ahora se ha quedado sin 250.000 euros que como todos sabemos es un pastón.

El nombre de este imbécil la prensa no lo ha revelado.

El Postiguet

Igual le está bien empleado.

Saludos d'esti llobu.

Tu estas contando el timo del tocomocho, nada mas, y al final me das la razon, usas la palabra imbecil, como la uso yo y nos pones de ejemplo un chanchullo levantino, si es que al final siempre termino teniendo razon

Antisozzial escribió:Tu estas contando el timo del tocomocho, nada mas, y al final me das la razon, usas la palabra imbecil, como la uso yo y nos pones de ejemplo un chanchullo levantino, si es que al final siempre termino teniendo razon

¿Darle yo la razón, dice usted? No señor, de eso nada. Si quiere La Razón cómprela en el primer quiosco que encuentre, que esa clase de tebeos yo ni leo ni compro.

¡Señor, qué cruz con estos maños!, siempre pidiendo regalos. Como entenderán, la pela es la pela no es solo frase catalana; a ese club sea punta cualquiera.

El Postiguet