A la segunda cuestión, como el Cesarlalira me pregunto qué tiene que ver el instinto reproductor para mimetizar comportamientos o pensamientos. Ése es el "programa", mimetizar para "encajar", para ser aceptado, para ser "correcto y admisible por los demás"...., no entiendo lo de la reproducción o el reproductor

Lo de la reproducción lo has introducido tú; al decir que si los robots no tienen instinto de reproducción, no se verán afectador por la emociones.

NEROCAESAR escribió:

A la segunda cuestión, como el Cesarlalira me pregunto qué tiene que ver el instinto reproductor para mimetizar comportamientos o pensamientos. Ése es el "programa", mimetizar para "encajar", para ser aceptado, para ser "correcto y admisible por los demás"...., no entiendo lo de la reproducción o el reproductor

Lo de la reproducción lo has introducido tú; al decir que si los robots no tienen instinto de reproducción, no se verán afectador por la emociones.

¿Te refieres a que lo he introducido yo o te refieres a que lo ha introducido Kim, que ha sido el que lo ha escrito?...¡Lio,madre!

NEROCAESAR escribió:¿Crees que todos nuestros errores y tabúes provienen de nuestro instinto reproductor?

Atlántida escribió:A la segunda cuestión, como el Cesarlalira me pregunto qué tiene que ver el instinto reproductor para mimetizar comportamientos o pensamientos. Ése es el "programa", mimetizar para "encajar", para ser aceptado, para ser "correcto y admisible por los demás"...., no entiendo lo de la reproducción o el reproductor

Bueno más que de reproducción quizá habría que decir "instinto de prosperidad".
El ser sociable y encajar y todo esto los humanos suelen verlo como cualidades positivas porque son factores que correlacionan positivamente con la prosperidad terrenal. Un robot no tiene por qué tener esta prioridad, de hecho puede serle completamente indiferente su propio destino, aún suponiendo que pueda pensar en él. Incluso si consideramos una máquina con imperfecciones de tipo "instintivo" ¿cuáles serían estos miedos y tabúes que según tú, Atlántida, adquirirían? No todo humano tiene los mismos...

Atlántida escribió:Me recuerdas a la Botella, mezclando peras y manzanas,jajaja.

Ahí no te he entendido. ¿Peras y manzanas el qué? ¿Te refieres a las máquinas relativamente simples con las naturales? ¿a mezclar reproducción con miedos y tabúes?
Sobre lo segundo creo que ya he respondido, y si te refieres a lo primero no veo mezcla alguna: no he hablado de si, por ejemplo, una Thermomix pone entonación borde o alegre cuando entra en una sala de espera y pregunta quién es el último, sino de variaciones en el ritmo y en la amplitud de oscilación de máquinas relativamente simples. (Si el nivel de complejidad de una analogía tuviera que ser equivalente al de la cosa a la que hace referencia, aquella sería completamente inútil.) Si una parte de la materia pudiera elegir libremente, como parece que crees, cabría esperar este tipo de comportamientos ¿no?

Atlántida escribió:A la primera cuestión: ¿No puedes decidir "reducir tú velocidad" en un momento dado?, ¿girar a la izquierda en vez de a la derecha, cuando lo tenías previsto todo el camino pero tu instinto te dicta otra cosa? ¿decidir que prefieres ir desnudo, aunque te de vergüenza?

¿Ves? Esto es lo que pasa por no hablar civilizadamente, es decir con un mínimo de precisión, aunque solo se quede en intento...
Respondiendo: ¡Por supuesto! Puedo elegir (en sentido trivial) tomar una dirección diferente de la prevista, pero no puedo escoger tomar una dirección diferente de la predeterminada.

Atlántida escribió:Y, claro que nos "programan" muchos seres humanos, a su vez programados anteriormente: nuestros padres, maestros, amigos, parejas, sociedad en la que vivimos....No sé si estamos hablando de lo mismo o de cosas diferentes, la verdad....¡me parece tan obvio!

Ahí tengo que autocitarme:

Darth Kimbo escribió:Es que a eso voy: no podemos tener cambios de opinión, reacciones fuera de tiempo ni tomar decisiones no "programadas", aunque no nos haya programado totalmente y en exclusiva ningún otro humano.

Y preguntar seguidamente: ¿para qué gasté dedos y tiempo escribiendo lo que ahora señalo en negrita?
No tengo claro que es lo que te parece tan obvio. La influencia de los demás (aparte de no ser total y exclusiva, obviamente, como ya había dicho anteriormente) no es ejercida con conocimiento de causa (no se sabe de forma clara qué estímulo causará o evitará un determinado comportamiento). El arte de influir se basa en unas probabilidades de éxito que distan mucho de la perfección. Tan compleja es la mente humana que me temo que en los próximos dos siglos no se conseguirá actuar sobre ella con un fin puntual y preciso, para modificar algún gusto, opinión o voluntad concretos.
¿Qué palabras mágicas exactas hay que decirle a un determinado niño de 12 años con el que pasas una tarde, para que cuando tenga 21 no quiera usar el emoticono del conejo ? Creo que es imposible responder a eso con un buen grado de certidumbre, ya que son tantísimos los estímulos que va a tener hasta entonces (no sólo de otras personas sino del medio inanimado, de sus propios pensamientos, etc.) que su personalidad para entonces será totalmente impredecible para cualquier mortal, que no indeterminada.