Yo estoy de acuerdo con lo que dice Rhhevoltaire; quizás y debido a su buena educación, le de palo mentir y así de esa forma, un tanto retorcida, nos esté contando (presuntamente) la verdad y de ahí tambié su guiño...

Bárcenas no fue citado en su discurso si se fijan, ni siquiera para decir que confiaba en la contabilidad A cuando este era su trabajo...Lo más natural hubiese sido confiar en Barcenas y proclamar que él no había escrito los apuntes contables. Digo yo, o para animarle a que defienda al partido o darle un escarmiento por inventarsela. Pero nada, no existe. ¿por no mentir a sabiendas no lo nombra? Si todo es tan trasparente no debe haber ningún problema que le impida decir "Bárcenas"

Cuando estás en el gobierno parece que estés jugando al Tabú. Hay palabras que no puedes decir: no pudes decir crisis, no puedes decir amnistia fiscal, no puedes decir recortes... y ahora no podia decir Bárcenas.

Lo que creo es que Rajoy teme nombrarlo por si algo de lo que diga acerca del ex-tesorero le molesta...y suelta alguna hoja más.

Jejeje....... el subconsciente les delata. Me aseguran que el tweet es completamente cierto (no está manipulado)
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Hasta el mismo Rajoy lo admite: Todos es falso salvo algunas cosas que han sido publicadas por los medios de comunicación"

Ni sombra de duda sobre la autenticidad de los papeles de Bárcenas, que para el PSOE no son supuestos:
,
sino la indiscutible «contabilidad oculta» del PP. El secretario de
Organización de los socialistas, Óscar López, defendió ayer con una
vehemencia inédita las hojas de apuntes que, en principio, habría visto
únicamente publicadas en las páginas de los periódicos. En Ferraz lo
llamaban ayer «el listado» y su validez no ha sido objeto del mínimo
debate, de hecho sustancia la petición del secretario general, Alfredo
Pérez Rubalcaba, de que el presidente del Gobierno dimita.

Llama la atención que el PSOE denoste a Bárcenas por haber
acumulado en sus cuentas suizas 22 millones de euros con artes
presumiblemente propias de un bandolero y a la vez le agasaje con todo el crédito posible como escribano de las entradas y salidas de dinero en la calle Génova.
Ahí sí que el ex tesorero no engaña, ahí sí que Bárcenas es de fiar,
piensan los socialistas, de modo que van a pedir a la Audiencia Nacional
que reclame esas notas porque «tendrá que ser la Justicia la que aclare
lo que está pasando», anunciaba ayer López.

Mariano Rajoy reprochó el sábado al jefe de la oposición
que esté aceptando ciegamente lo que para el PP son «insinuaciones». Su
número tres en el partido respondió el lunes con reforzada declaración de fe en las cuentas manuscritas del extesorero: «(Rajoy)
sabe como yo que no puede decir que todo es falso. Que no puede decir
eso. Si el señor Rajoy dice que todo es falso está mintiendo», dijo.

En resumen, Bárcenas puede ser un corrupto amasador de
euros ajenos, pero es un notario inmaculado. Ni hay sospecha en el PSOE
de que sus renglones mezclen verdadero con inventado, ni que se hayan
fabricado adrede, ya que algunos apuntes coinciden con los de la trama
Gürtel. Resulta paradójico
que el individuo más oscuro de todo este caso sea la pieza a la que se
están agarrando los socialistas para tirar a ver si cae el Gobierno.
También lo es que Óscar López aseverara ayer que en su partido «no ha
cambiado nunca la posición, la actitud en asuntos que tienen que ver con
investigaciones judiciales» cuando fue preguntado por qué no se apartó
al entonces minsitro José Blanco de sus funciones cuando se
multiplicaron las acusaciones de que había recibido en una gasolinera el
sobre de dinero de un empresario. Dice el PSOE que es que aquello era
falso.

Lo que resulta curioso es que el cargo de "Tesorero" que debiera recaer sobre el miembro más impoluto de un partido político, hayan decidido dárselo a este señor, o a su predecesor... igual significa que efectivamente éste señor era el mas impoluto del partido... visto lo visto.

Pues sí...

ABC:
Los supuestos apuntes contables del Partido
Popular publicados por el diario El País:

no solo han supuesto una
auténtica revolución entre la clase política de nuestro país. También
han conmocionado a los expertos en contabilidad por las «muchas
incoherencias» encontradas en los documentos. Así lo han afirmado a este
diario tanto economistas, como auditores y expertos financieros
consultados y que apuntan básicamente a dos grupos de irregularidades.
En primer lugar, el cruce de registros entre
contabilidad oficial y contabilidad «B», un auténtico despropósito para
los conocedores de la gestión de la tesorería. «Nunca
un movimiento que queda registrado en las cuentas oficiales de una
empresa o partido político tiene también reflejo en una contabilidad
oculta», asegura un auditor que prefiere mantener el anonimato.
Precisamente, ABC publicó el pasado domingo que el crédito de cinco
millones de pesetas que el presidente del Senado, Pío García-Escudero,
reconoció que había pedido al PP y que figuraba en la supuesta libreta
del extesorero Luis Bárcenas está incluido en la contabilidad oficial
del PP.

Transferencia bancaria


El reconocimiento por parte de García-Escudero
de la veracidad de ese préstamo -solicitado para reparar los daños que
había sufrido su casa en un atentado terrorista- fue esgrimido algunos
medios de comunicación y partidos políticos como una prueba de la
veracidad de los documentos publicados por el diario del grupo Prisa.
Sin embargo, el registro desvelado por ABC en el que se refleja como
García-Escudero devolvió en tres años la cantidad total a plazos
mediante transferencias bancarias de su cuenta personal arrojan ahora
serias dudas sobre la autenticidad de la supuesta contabilidad oculta de
Bárcenas. «Una
contabilidad B, por definición, es parca y reducida y nunca refleja
operaciones que se lleven a cabo por transferencia bancaria.
Lógicamente su objetivo es desvincularla de la contabilidad oficial»,
afirma otro profesional del mundo de la auditoría que ha analizado los
papeles con este diario.

El otro foco de controversia suscitado por la libreta de Bárcenas entre el mundo económico se centra en las «incoherencias técnicas» de los documentos. «No responden a una contabilidad ordinaria, presentan importantes contradicciones»,
explica otro economista. El hecho de que las anotaciones estén
realizadas a mano, si bien no es un hecho que demuestre su falsedad,
también ha despertado algunas dudas. «Parece una contabilidad del siglo
XIX. Aunque sea un registro oficioso, en estos tiempos normalmente se
utilizan herramientas informáticas», concuye otro analista.