Están de moda y son puro azúcar. Hoy queremos compartir una fórmula para hacerlos más ligeros y nutritivos sin necesidad de renunciar a un buen bocado. Nuestro truco será cambiar algunos de los ingredientes. Toma lápiz y papel.

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Ingredientes para 6 unidades

¼ de una taza de azúcar
Una taza de harina (media blanca y media integral)
1 cucharadita de levadura
Sal
¼ de kiwi u otra fruta que tengas a mano
2 huevos o 1 si es XL
½ cucharadita de extracto de vainilla
¼ de leche de soja
25 gramos de Margarina

Batimos el azúcar con la margarina hasta conseguir una mezcla homogénea. Añadimos el huevo y seguimos batiendo. Mezclamos la harina con la levadura. Lo añadimos a la mezcla que teníamos preparada. Batimos más despacio y sin parar nuestra batidora añadimos la leche, el extracto de vainilla y el kiwi. La mezcla debe quedar lo más homogénea posible.

Cubrimos con la masa los moldes para el horno. Será más cómodo si te ayudas de una manga pastelera. Hasta la mitad es suficiente. Con el horno precalentado los metemos unos 20 minutos a 180º. Mientras lo dejamos en el horno vamos preparando la cubierta.

Ingredientes para la cubierta:

50 gramos de azúcar glass
30 gramos de margarina
¼ de leche de soja
Unas gotas de jugo de kiwi
Gotas de chocolate

Mezclamos la margarina con el azúcar previamente tamizado y añadimos la leche y el jugo. Lo batimos y a medida que se vaya mezclando iremos incrementando la velocidad. Debería quedar con una textura similar a la del helado.

Saca los cupcakes del horno y espera a que enfríen. Necesitaremos una manga pastelera y una boquilla (nosotros usamos una de estrella). Llenamos la manga con la cubierta y empezamos a aplicar la cobertura desde el centro del cupcake y girando en círculos hacia el exterior. Espolvoreamos unas gotas de chocolate y... ¡Listo!

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