Los responsables de comunicación denuncian que algunos medios "rompen el clima de cordialidad" en las ruedas de prensa.
En pleno debate por la reforma de la Ley Mordaza criticada por la izquierda porque "limita los derechos fundamentales" y "criminaliza la protesta", los equipos de comunicación de PSOE, Podemos y otros diez partidos han presentado un escrito para que se tomen "medidas" contra los periodistas críticos. Según estos partidos, las preguntas incómodas de los medios son "faltas de respeto" y reclaman a la presidenta Meritxell Batet, que haga algo.
El documento, firmado por PSOE, Unidas Podemos, PNV, EH-Bildu, JuntsxCat, PDCat, ERC, Más País-Equo, CUP, Compromís, BNG y Nueva Canarias, va dirigido a la Secretaría General del Congreso de los Diputados. Le piden "tomar medidas para restablecer el buen funcionamiento de las ruedas de prensa en el Congreso, sin poner en riesgo la libertad de información y el buen clima que siempre ha existido".
Sin especificar a qué "medidas" se refieren, los responsables de comunicación de los partidos firmantes denuncian que están preocupados porque "hace ya tiempo" que observan "intolerables faltas de respeto hacia el personal de algunos grupos parlamentarios por parte de algunas personas acreditadas en la sala, que rompen el clima de cordialidad y decoro entre periodistas, políticos y personal de los grupos".
En el texto, los partidos tampoco aclaran cuáles son esas faltas de respeto o a qué periodistas y medios de comunicación se están refiriendo, aunque todo apunta a que los últimos encontronazos políticos con 7NN o Estado de Alarma TV tienen mucho que ver. El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, incluso se negó a contestar a las preguntas alegando que él no participa en "burbujas mediáticas de la ultraderecha".
Lo de Rufián no me sorprende ni lo de la mayoría de esos partidos pero el PSOE debería disimular un poquito para no ser como ellos, vergonzoso.
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