Las semillas del cannabis contienen todos los aminoácidos esenciales y ácidos grasos esenciales necesarios para mantener una vida saludable. Ninguna otra planta proporciona proteínas vegetales de forma tan fácilmente digerible o presenta los aceites esenciales para la vida en una proporción tan perfecta para la vitalidad y la salud humanas.
Las semillas de cáñamo presentan un mayor contenido de ácidos grasos esenciales que cualquier otra planta. El aceite de cañamón está entre los que presentan una menor cantidad de grasas saturadas, con un total del 8% del volumen total del aceite. El aceite exprimido de cañamón contiene un 55% de ácido linoleico (AL) y un 25% de ácido alfa-linoleico (ALN). Solo la fibra de lino contiene más ácido linoleico, con un 58%, pero el aceite de cañamón es el que presenta una mayor cantidad de ácidos grasos esenciales (AGE), con un total del 80% del volumen del aceite.
Los ácidos grasos esenciales son responsables de nuestra respuesta inmunológica.
"En los viejos tiempos, los campesinos tomaban mantequilla de cáñamo. Mostraban una mayor resistencia a las enfermedades que la nobleza. Las clases nobles nunca hubieran tomado cáñamo justamente porque era un alimento de los pobres." - R. Hamilton (Dr.) Investigador Médico-Bioquímico Emérito de la UCLA.
Tanto el AL como el ALN están presentes en la producción de energía de los alimentos y en el desplazamiento de dicha energía a través del cuerpo humano. Los ácidos grasos esenciales rigen el crecimiento, la vitalidad y el estado de ánimo. El AL y el ALN están asimismo presentes en la transferencia del oxígeno del aire de los pulmones a todas las células del cuerpo. También son en parte responsables de mantener el oxígeno en la membrana celular, donde actúan como una barrera contra la invasión de virus y bacterias, que no prosperan en presencia de oxígeno.
La forma arqueada de los ácidos grasos esenciales les impide disolverse. Son resbaladizos y no obstruyen las arterias como las pegajosos y rectilíneas grasas saturadas y los ácidos grasos
trans que suelen hallarse en los aceites de fritura y en la manteca (creados al someter a las grasas poliinsaturadas a altas temperaturas durante el proceso de refinamiento).
El AL y el ALN poseen una carga ligeramente negativa y tienen tendencia a formar capas superficiales muy finas. Esta propiedad se denomina ‘actividad de superficie' y permite llevar sustancias como las toxinas a la superficie de la piel, a los intestinos, a los riñones y a los pulmones, por donde pueden ser eliminados.
La naturaleza ha provisto a las semillas de una cáscara que protege a los aceites y vitaminas vitales para evitar su pérdida. La envoltura de las semillas es un contenedor perfecto y totalmente comestible. El cañamón puede molerse hasta formar una pasta similar a la de la mantequilla de cacahuete, excepto por un sabor más delicado. El nutricionista Udo Erasmus (Dr.) ha declarado: "La mantequilla de cáñamo es muy superior a la mantequilla de cacahuete en cuanto a nivel nutricional." Las semillas una vez molidas pueden hornearse en panes, pasteles y guisos. El cañamón es un acompañamiento ideal para las barritas de cereales (muesli).
Los pioneros en el campo de la bioquímica y de la nutrición humana sostienen que las enfermedades cardiovasculares (ECV) y muchos tipos de cáncer están relacionados con la degeneración por grasa causada por el continuo abuso de grasas saturadas y aceites vegetales refinados, que convierten los ácidos grasos esenciales en nocivos agentes carcinógenos. Uno de cada dos estadounidenses fallecerán por las secuelas de alguna ECV y uno de cada cuatro estadounidenses fallecerán a consecuencia del cáncer. En los países industrializados, más personas que nunca están sucumbiendo a enfermedades relacionadas con deficiencias del sistema inmunitario y muchos investigadores creen que el cáncer surge cuando la respuesta de nuestro sistema inmunológico es débil. Los investigadores están llevando a cabo estudios muy prometedores en los cuales los aceites esenciales del cañamón parecen mejorar los sistemas inmunológicos de pacientes con el VIH.
La proteína completa presente en el cañamón proporciona al cuerpo todos los aminoácidos esenciales necesarios para mantener la salud. Proporciona los aminoácidos esenciales en la proporción correcta para que el cuerpo genere albúmina sérica y globulinas séricas, de un modo similar al efecto estimulador del sistema inmunitario de los anticuerpos gammaglobulina.
La capacidad del cuerpo para resistir y recuperarse de la enfermedad depende de la rapidez con que pueda producir cantidades ingentes de anticuerpos para defenderse del ataque inicial. Si la cantidad inicial de globulinas no es suficiente, el número de anticuerpos puede ser insuficiente para atajar la enfermedad.
El mejor sistema para asegurarnos de que el cuerpo dispone de suficientes aminoácidos para fabricar las globulinas es comer alimentos con un alto componente de proteínas globulinas. Las proteínas del cañamón contienen un 65% de globulina Edestina e incluyen una cierta cantidad de albúmina, de modo que su fácilmente digerible proteína está rápidamente disponible con una forma similar a la del plasma sanguíneo.
El cañamón fue, en su momento, utilizado para tratar deficiencias nutricionales asociadas a la tuberculosis, una grave enfermedad causante de un bloqueo nutricional que hace que el cuerpo se consuma. (Estudio Nutricional Checoslovaco sobre la Tuberculosis, 1955).
¡La energía de la vida está en sus semillas y los alimentos elaborados con cañamón están riquísimos! Las semillas de cáñamo ayudan a asegurarnos que obtenemos suficientes aminoácidos esenciales y ácidos grasos esenciales para fortalecer nuestros cuerpos y sistemas inmunológicos y mantener así nuestra salud y vitalidad.
Extracto traducido de 'Hempseed Nutrition' ('La nutrición de las semillas de cáñamo '), de Lynn Osburn. Producido por Access Unlimited, P.O. Box 1900, Frazier Park, CA 93225 EUA. via
The Emperor Wears No Clothes by Jack Herer.)
http://hashmuseum.com/es/beneficios-nutricionales-de-las-semillas-de-canamo