Existen diferencias entre lo real y entre lo imaginario. Estas diferencias radican en la manera de conceptualizar las formas.
Los tres modos de la forma son los siguientes:
Forma real
Forma aparente
Forma imaginaria
La forma real es en su esencia la pureza exenta de toda manipulación artificial o premeditada. Es decir, la esencia natural no manifestada del pensamiento humano y que se halla en lo más profundo del ser. Esto tiene, generalmente, un carácter subconsciente. En este plano es donde se encuentran todos los símbolos de nuestra mente que se nos muestran a través de los sueños y de ciertas formas de estados alterados de la conciencia.
La forma aparente pertenece al plano de lo artificial. Todo aquello que posee variaciones o aspectos distintos de la misma cosa; la flexibilidad y la modificación. La forma aparente contiene a la forma real, de ahí que se preste a confusión. Distinguir entre la forma aparente y entre la forma real es tarea difícil para aquellas personas que no posean un fuerte autoconocimiento y una conciencia real de lo que le rodea. Esta forma pertenece al plano del inconsciente. Esta es la parte donde se realizan los actos mecánicos.
La forma imaginaria es la más cercana a la realidad psicológica ya que es la más exteriorizada. En todo momento la mente imagina, crea, construye o destruye conscientemente, pero siempre, generalmente, en el ámbito imaginario. Esta forma pertenece al plano de la conciencia.
Por tanto, conocer la diferencia entre lo real y lo imaginario consiste en saber como acceder a cada plano, a cada forma. Para conocer que es lo que se cuece en nuestro subconsciente primero tendremos que perpetrar los muros del inconsciente, siempre en todo momento siendo conscientes de nuestra actividad psíquica. En pocas palabras, lo real se puede conocer en su naturaleza más pura a través de nuestra imaginación, de la misma manera que conocer los procesos reales de nuestra imaginación consiste en concedernos la envoltura de la realidad.
Hay personas que confunden la palabra real con la palabra verdad. Lo real es algo que ya existe, algo que ya está creado y que puede ser una manifestación de la verdad. La verdad es algo que puede demostrarse con la realidad. Lo real es innegable. La imaginación también es real, pero puede suceder que no sea verdadero lo que se imagina. Es decir, aquí la verdad puede ser manipulada y modificada.
Admitir la existencia de la realidad y de la imaginación es algo que nuestra mente ha de discernir. Pero hay algo que es verdad: lo imaginario es real, lo real es parte de lo imaginario.