Diarios de sueños

V.I.P. Mensajes : 11219

Liptuan escribió:: Um... me recuerda al mio de marcar un numero para llamar a alguien y no conseguirlo... Impotencia supongo, hacia algo, ambos sueños, aunque el tuyo también me ha hecho pensar en la nostalgia.

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Mi sueño de hoy es algo ridículo, he tenido un sueño un poco cursi con un actor... de una de la películas más cursis de la historia jajaja, y lo dejo ahí, Diox.

Sí podría haber un algo de nostalgia; hay cosas que echo mucho de menos. Aunque creo que también podría indicar dificultades y problemas que tengo actualmente. Este sueño me desagrada y me cansa; a ver si tarda en aparecer Suspect

V.I.P. Mensajes : 100010

Pues yo he tenido la clásica pesadilla de ser aducido por extraterrestres .
Estar en una mesa de operaciones y que me sacan algo del abdomen .
En ese momento desperté.
El que operaba ? Si era el alto. Diarios de sueños - Página 2 735732

No se ha vuelto a repetir o no se.
Generalmente se que sueño , pero no recuerdo los detalles.

V.I.P. Mensajes : 11219

Otro sueño que acostumbro a tener repetidas veces, es que voy andando tranquilamente por una calle muy entrañable del barrio donde nací y por donde pasaba muchas veces cuando era niña. Allí encuentro una tienda, (una pastelería), que está surtidísima de género, todo con muy buen aspecto; la tienda también es muy bonita y está muy bien decorada, aunque de estilo muy antiguo. Allí compro algo…(no sé exactamente el qué), pero es poquito, y salgo muy contenta hacia mi casa (la que vivía cuando niña)

Otras veces, aunque menos, sueño lo mismo pero al revés. La tienda está abandonada, sucia, sin género y prácticamente en ruinas, pero no lo clasifico como una de mis pesadillas…

V.I.P. Mensajes : 11219

Hoy he tenido un sueño digno de poner en este hilo...jeje

Todo transcurre en las calles del barrio donde vivo actualmente; cerca de mi casa. Hay una fiesta popular, yo estoy en ella, voy tranquilamente deambulando de un lado para otro y tomo la comida que me ofrecen en los puestos ambulantes. Sigo en la fiesta, me gusta y me siento muy bien. De pronto me encuentro sentada en una terraza tomando algo en una mesa llena de gente, aunque son ajenos a mí y no los conozco de nada, pero estamos todos muy bien. Luego, discretamente, salgo de la fiesta por una calle lateral y me voy a casa...Entonces he despertado y he recordado este hilo. He hecho un esfuerzo por recordar el sueño; mi tendencia era dormirme al momento. Aún así, después de retenerlo, me he dormido hasta el timbrazo del despertador.

Experto/a Mensajes : 1301

Gloriana escribió:: Hoy he tenido un sueño digno de poner en este hilo...jeje

Todo transcurre en las calles del barrio donde vivo actualmente; cerca de mi casa. Hay una fiesta popular, yo estoy en ella, voy tranquilamente deambulando de un lado para otro y tomo la comida que me ofrecen en los puestos ambulantes. Sigo en la fiesta, me gusta y me siento muy bien. De pronto me encuentro sentada en una terraza tomando algo en una mesa llena de gente, aunque son ajenos a mí y no los conozco de nada, pero estamos todos muy bien. Luego, discretamente, salgo de la fiesta por una calle lateral y me voy a casa...Entonces he despertado y he recordado este hilo. He hecho un esfuerzo por recordar el sueño; mi tendencia era dormirme al momento. Aún así, después de retenerlo, me he dormido hasta el timbrazo del despertador.

Qué bien, parece un sueño bien bonito. Me alegro de que hayas podido recordar tus sueños.

Yo hoy "no he soñado" (he dormido tres horas), de hecho no recuerdo sueños "estables" desde el día siete. También será porque no me he preocupado tanto ni por pensar en sueños durante el día, ni por la alimentación, ni escribiendo antes de acostarme los sueños de la noche anterior, ni por tener el boli con el papel en la mesita, ni por poner demasiado empeño al despertar.

Los sueños del día siete, casualmente (el mismo día que Liptuan soñó lo último que contó), como en el sueño de Liptuan, estabamos en un piso ella, yo y su hermano (yo no recuerdo a su ex por allí, pero es que tampoco le conozco...). No recuerdo que fuera un barrio con inmigración marroquí, pero es cierto que el piso estaba en una corrala de esas que tanto gustan a los panchitos de Madrid. La ventana de la habitación del hermano de Liptuan estaba haciendo esquina en el patio interior, y a la pared contigua a esta esquina había otra ventana que también daba a nuestro piso, que estaba abierta y salia luz. Mi cuñado (si es que se puede decir así) estaba en el ordenador y gritaba algo a alguien de la otra ventana, en plan barriobajero. Mientras estaba con estos gritos me vio a mí subir por las escaleras interiores y a voces -parecía un macarrilla, o un 'malote', como se prefiera- me dijo: "¡¿Qué, ya vas dronjado?!". Era algo que a mí me parecía evidente (una vez más, sin plantearme siquiera que podía ser un sueño) ya que momentos antes había tenido la primera parte de este sueño (se podría decir que en realidad era otro, porque no hay continuidad entre uno y otro, pero cuando subía las escaleras tenía el otro en mi memoria episódica y creo que sucedió todo dentro del mismo ciclo REM).
En la primera parte del sueño yo iba por alguna especie de playa. Primero iba acompañado pero luego me separaba y me ponía a jugar en la arena y en castillos de esos hinchables que ponen para los niños. Subí a uno de ellos y vi que estaba llena la playa, no había nadie más, sólo yo y las atracciones hinchables. Qué divertido era tirarse en tobogán, ¿cómo podía haberlo olvidado? Me aficioné a subir a todas y cada una de las atracciones y lanzarme por el tobogán, y disfrutaba tanto de ver la vista en lo alto como de deslizarme hacia el suelo con aquella sensación de baja gravedad. Sin embargo la última que subí me pareció excesivamente alta. Miré a ver si podía dar marcha atrás y bajar pero no había escaleras. Me asomé en el tobogán, o mejor dicho pared deslizadera, porque de alguna manera tenía que bajar...pero me quedé horrorizado al comprobar que era excesivamente estrecha, sin ningún tipo de barandilla ni seguridad, y para colmo al final de todo se inclinaba hacia arriba, de modo que una caída era siempre inevitable. No recuerdo la forma en que salí de allí, pero sí me recuerdo volviendo a casa como quien vuelve borracho de una fiesta tarde y ya con síntomas de resaca.

El primero que tuve esta noche fue que Mmonchi vivía en el ático de nuestro bloque de pisos.

El último (creo, si recuerdo bien el orden) fue que estaba en una especie de asamblea de estas de los indignados y acababa de hablar uno, al que le aplaudieron muchos. Yo quise salir al sitio ese para que Liptuan me hiciera una foto porque me hacía gracia, y poco me importaban las opiniones de los espectadores. Salí y me quedé parado, mirando a Liptuan -a su cámara-, y la gente me miró primero extrañada y luego con actitud un poco hostil. Por lo que sea, Liptuan no quiso hacer la foto. Me fui de allí y mientras salía oí que los demás murmuraban contra mí "en vez de aplaudir".

Lo único que recuerdo con claridad después de ese día fue del día siguiente, por la mañana. No era un sueño normal ni lúcido, sino "visiones sutiles" que tuve gracias a que fumé un poco de Salvia divinorum [x 10]. No tomé nota de todo, pero sí quedó muy claro algo que ya había percibido otras veces con la misma hierba: todo yo me transporto a una especie de palacio árabe, es remarcable la blancura de todas las paredes y la frescura del aire que entra, todo parece limpio y puro y yo me siento sano, joven y afortunado (no hablaría en términos de riqueza material porque en ese estado lógicamente no pienso en adquirir nada nuevo, simplemente tengo todo lo que un hombre puede desear). Cuando oigo pasos, ya sean vecinos o gente de la calle, tengo la convicción de que son "el servicio". A veces (no esta última vez) noto que me están abanicando. Curiosamente si me imagino todo eso normalmente me parece hasta cierto punto desagradable, como si eso tuviera que significar perder toda intimidad, depender de los demás, y pienso que siempre estaría temiendo que alguien conspirara contra mí, incluso mis propios siervos...pero en estas visiones es absolutamente todo lo contrario, como si mis siervos fueran seres sutilísimos ajenos a cualquier mal pensamiento y con gran devoción hacia mí, será porque son entes de mi mente. Cuando estoy "allí" (en mi palacio) no hago nada, pero no siento pereza, ni tedio, ni aburrimiento, ni inquietud, sino que estoy en un estado contemplativo difícilmente alcanzable por otros medios. Lástima que "el viaje" dura cinco minutos o menos...porque la sensación de estar en otro sitio y en otro tiempo es brutalmente real, aunque si se abren los ojos (todo transcurre en una especie de "hipnagogia" hiperrealista) se es perfectamente consciente de dónde estamos físicamente.

V.I.P. Mensajes : 100010

Gloriana escribió:: Hoy he tenido un sueño digno de poner en este hilo...jeje

Todo transcurre en las calles del barrio donde vivo actualmente; cerca de mi casa. Hay una fiesta popular, yo estoy en ella, voy tranquilamente deambulando de un lado para otro y tomo la comida que me ofrecen en los puestos ambulantes. Sigo en la fiesta, me gusta y me siento muy bien. De pronto me encuentro sentada en una terraza tomando algo en una mesa llena de gente, aunque son ajenos a mí y no los conozco de nada, pero estamos todos muy bien. Luego, discretamente, salgo de la fiesta por una calle lateral y me voy a casa...Entonces he despertado y he recordado este hilo. He hecho un esfuerzo por recordar el sueño; mi tendencia era dormirme al momento. Aún así, después de retenerlo, me he dormido hasta el timbrazo del despertador.

no despiertas cansada ?
siempre estas caminando.

V.I.P. Mensajes : 11219

Ronaldo512 escribió:

Gloriana escribió:: Hoy he tenido un sueño digno de poner en este hilo...jeje

Todo transcurre en las calles del barrio donde vivo actualmente; cerca de mi casa. Hay una fiesta popular, yo estoy en ella, voy tranquilamente deambulando de un lado para otro y tomo la comida que me ofrecen en los puestos ambulantes. Sigo en la fiesta, me gusta y me siento muy bien. De pronto me encuentro sentada en una terraza tomando algo en una mesa llena de gente, aunque son ajenos a mí y no los conozco de nada, pero estamos todos muy bien. Luego, discretamente, salgo de la fiesta por una calle lateral y me voy a casa...Entonces he despertado y he recordado este hilo. He hecho un esfuerzo por recordar el sueño; mi tendencia era dormirme al momento. Aún así, después de retenerlo, me he dormido hasta el timbrazo del despertador.

no despiertas cansada ?
siempre estas caminando.

...es que soy muy activa bounce

Experto/a Mensajes : 1301

Después de tanto tiempo sin recordar sueños (no le pongo tanto interés como hace unas semanas, especialmente porque no dispongo de tanto tiempo como me gustaría, lo cual es esencial por ejemplo para escribirlos), he conseguido recordar un extraño sueño a día de hoy.

Liptuan y yo estábamos en Madrid y queríamos ir al cine, para lo que había que coger el metro. Estábamos en la estación, todavía entrando, cuando se escuchó un ruido como de un convoy al llegar. Ella salió corriendo, como si temiera perder el tren. Yo traté de seguirla pero al bajar ya no estaba, y no sabía si había ido a la vía de la derecha o a la de la izquierda. Mi instinto me dijo que tenía que ser el tren que había en este momento a mi derecha y que empezaba a emitir el sonido ese de que van a cerrar las puertas. Fui a subir pero estaba muy oscuro y parecía que entre andén y vagón había un gran trecho, así que simplemente pegué unos cuantos golpes por las ventanas. Bajó la maquinista y me preguntó si pensaba subir. "Es que está muy oscuro y me da miedo caer ¿no podría haber más luces en esta estación?", pregunté yo. Lo único que dijo la maquinista fue: "Si va a subir suba, que no le pasará nada, y si no quédese". Subí lentamente y con un cierto miedo, algo más dije, pero no lo recuerdo, lo único que recuerdo es que hablé en catalán y la otra me respondió normalmente, cosa que después me extrañó un poco (esas curiosas escenas de cambiar de idioma involuntariamente y que al resto del mundo también le resultara indiferente me sonaban de algo...precisamente de otros sueños, y en eso me quedé yo pensando, no en que ya lo había soñado, sino con la sensación de déjà vécu ¿por qué la tenía?).
No encontré a Liptuan en el vagón, y me senté en uno de los asientos, que parecían inusualmente cómodos, incluso reclinables, y mirando hacia delante todos. El viaje hasta la primera parada (donde esperaba dar la vuelta o hacer algo para volver a encontrarme con Liptuan) duró media hora larga -evidentemente no debí estar tanto tiempo soñando, simplemente al llegar a la parada tenía la sensación de que había transcurrido todo este tiempo-, durante la cual había ido viendo detalles extraños: el tren era muy corto y compacto, estábamos en el aire libre -tocaba el sol todo el rato, cosa curiosa tratándose de un metro- y circulabamos muy cerca de los coches. Al bajar a campo abierto en la primera parada (podí haberme preguntado por qué había que bajar todos en vez de esperar a que subieran y bajaran los que quisieran, pero no lo hice), donde algunos decidieron fumarse un cigarro asomados por el punente de una especie de lago o río, miré el bagón y quedé atónito al comprobar que iba armado con grandes ruedas de caucho. No me cabía duda de que había venido en un autobús y que no iba a ser tan fácil como cambiar de andén, la misión de volver al punto de partida. Vi casas a lo lejos y fui corriendo hacia allá.
Llegué al poblado y pregunté a alguien que había por allí dónde estábamos. Me respondieron que aquello era "Batán". Se estaba haciendo tarde y recordé que conocía a dos amigas que vivían en Batán (como si las conociera solo en el sueño, pues no tienen ningún correlato en la vida real) así que las llamé. Ambas trabajaban, casualmente, en una estación de metro que había allí y me dijeron cómo llegar. Entré y vi que no tenía dinero en efectivo para pagar el billete, miré por si me decidía a saltar pero todavía había seguridad y se me hacía extraño colarme delante de mis amigas que eran las únicas trabajadoras en aquél momento. Pagué con tarjeta. Me recibieron alegremente aquellas dos, contándome su vida y preguntándome la mía, cosa que extrañamente no me molestó, me sentía en buena compañía. Pregunté qué hora era y me dijo la mayor que iban a ser las doce. Escuché el zumbido del tren y fui corriendo hacia él, aunque todavía tenía que pasar por el torno para acceder al andén, bajé tan rápido como pude y vi que ya se había ido. Al parecer iba a ser el último, pero podía ser que viniera otro. Me dijeron que había que ir a una sala de espera para esperar el siguiente porque podía tardar más, y me acompañaron hasta este sitio.
La sala estaba llena de gente sucia y desarreglada, delgados y con el pelo graso y pegajoso. Había, además, unos váteres allí delante. Entré a mear a uno pero me gritaron los de fuera que saliera, que había alguien meando. No veía a nadie pero salí, y al mirar de nuevo y desde fuera vi que en cada váter había un tío, más delgado incluso que los de fuera, igual de estrambóticos que los demás y que parecían zombis.
Después de mucho esperar llegó, por fin, el tren, y la gente fuimos corriendo hacia él. Yo quise mirar por si me dejaba algo en la sala de espera y empezé a ver cosas mías y de Liptuan sobre un estante alto: su bolso, una mochila, la funda de la cámara, etc. Lo cogí lo más rápido que pude pero una vez más no llegué a tiempo al tren. No me quedaba otra que abandonar definitivamente la estación. Me planteé la posibilidad de quedarme a dormir en casa de mis amigas pero me pareció que sería raro y preferí evitarlo. ¿Llamar a un taxi? ni de coña, me saldría muy cara la broma y para eso preferiría esperar.
Pensé que tal vez podría encontrar una iglesia o algo así donde me dejaran refugiarme una noche. Salí a dar una vuelta por el pueblo. Vi una gran catedral que me recordó, de fuera, a la mezquita de Córdoba por el ambiente general (temperatura, movimiento de gente, olores), con una fachada similar a la catedral de Santiago de Compostela y una iluminación y situación respecto el resto del recinto que me recordaba mucho a la Basílica de Nuestra Señora del Pilar de Zaragoza, pero al mismo tiempo parecía pequeña, como si ocupara la misma superficie que un bloque normal y corriente. No entendía cómo podía haber en un pueblo o barrio de dimensiones tan reducidas un templo tan especial. Me alegré al pensar que podría pasar allí la noche, aunque fuera despierto, camuflado entre gente que hacía turnos para que siempre hubiera alguien (individuo o grupo) rezando dentro. Me coloqué en la cola (aunque parezca mentira, especialmente por ser aquellas horas de la madrugada, había cola para esto) y poco después ha sonado el despertador.

V.I.P. Mensajes : 14027

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