.
Una pulga y un ratón
y un escarabajo blanco.
Se pusieron a jugar
a la orilla de un estanco.
El ratón como era listo
se ha metido en el estanco.
Ha robado una cajilla
y un paquete de tabaco.
Ha salido la estanquera
con una escoba en la mano.
Que te cojo, que te pillo,
que te pillo, que te mato.
Ustedes se preguntarán —y no faltos de razón— ¿se ha vuelto loco este Postiguet trayéndonos estas canciones infantiles? Mi respuesta, por ser el aludido, será un rotundo NO. No me he vuelto loco, amigas y amigos, aunque de poeta y de loco todos tengamos un poco, sino que le sigo el juego a nuestros políticos, que, con esa habilidad que tienen, caradura al margen, nos cantan coplillas infantiles para hacernos dormir. Y nosotros nos entregamos en brazos de Morfeo sin rechistar. (Mañana les cantaré el que llueva , que llueva…)
El P©stiguet