Window requiere siempre una optimización. Para empeza requiere desactivar todos los servicios innecesarios, como por ejemplo el soporte para multiples pantallas, si no se tiene, tabletas digitalizadoras y otras cosas que nunca se usa y por defecto ocupan memoria, ralentizando el sistema..
Aparte urge precisamente en Windows 10 de repasar a conciencia la configuración de privacidad, por defecto para nada recomendable y causa de muchas críticas.