Si bien es cierto que no es novedoso, no deja de ser triste y dramático el nuevo incremento del paro, y la fuerte reducción de afiliados a la Seguridad Social.
Desde aquí animo a los que tienen un trabajo seguro y pocas deudas a que no sean temerosos, y que consuman, a ver si se prende así la chispa de una reactivación económica.