Cuando yo era niño donde vivíamos, existía el cambio de productos agrícolas, si mis abuelos llevaban queso a la tienda lo cambiaban por aceite, sal, o lo que les hiciera falta, y no había tantos problemas, se vivía en esa “caja de cerillas social” claro no existía televisión, lavadora, móviles, ordenadores, MP5, calefacción, ni aire acondicionado, y el coche era un caballo o había que andar varios kilómetros, lo difícil sería volver de la comodidad de servicios y consumo que tenemos actualmente, a vivir como en el pasado, pero seguramente nos adaptaríamos a todo, lo difícil seria los que viven en las grandes ciudades, y no saben hacerse ni una mermelada para conservar o guardar semillas y cereales para sobrevivir.