Una mujer de 22 años ha sido asesinada por unos canallas y cobardes talibanes, que la acusan de adultera, después de haber sido violada por los propios talibanes.
Como se ve las mujeres afganas siguen sufriendo en sus carnes castigos humillantes, latigazos o la propia muerte, por unos misóginos, machistas e intolerantes fanáticos talibanes, que no abandonan la violencia ni el terrorismo, a pesar de que representantes de 80 países en la Conferencia de Tokio, van a dar una ayuda a ese país de 16 mil millones de dólares, lo que es inaudito, mientras no se ponga freno a la violación sistemática de los derechos humanos y especial de las mujeres.