Da igual el partido que este en el poder, las televisiones públicas en una democracia, no deberían de ser portavoces de los políticos, si no entes neutrales al servicio de los ciudadanos, fíjate en la Telemadrid, de Esperanza Aguirre, que en el Parlamento Europeo hay una denuncia por manipulación informativa, pero les da igual, harán lo que quieran y mas con mayoría absoluta.