[2 meses más tarde...]
Ejem, pues sí, así es Madrid, la capital de un país dónde las cosas se hacen así, de cualquier manera, lo mismo da ocho que ochenta que diría mi abuela. Desde luego no hay cosa de la que me alegre más (bueno sí, la hay, pero no es el caso) que haber salido de esa ratonera. Detrás de cada gran evento hay una cadena de gilipolleces mal organizadas, ya ni se molestan en esconder las vergüenzas, y detrás de los pequeños eventos igual. Dejadez, falta de profesionalidad, incompetencia... Eso sí, las cámaras a grabar lo bonito, lo que pasa es que esto (de mostrar solo "lo bonito" ya es más complicado porque ahora ya podemos grabar cualquiera.
