- Si lo que busca es potencia, elija sobremesa.
- Si va emplearlo para trabajar, y su desempeño no exige alardes computacionales, escoja una gama media portátil. Liberará espacio en el escritorio y ganará la posibilidad de llevar la oficina a cualquier lugar.
- La ampliación de ordenadores está en desuso. Hoy apenas se mejora la memoria RAM y/o la tarjeta gráfica en casos muy concretos, de modo que no lo tome como un factor determinante.
- Más importante es la posibilidad de arreglarlo. Un componente estropeado en un sobremesa se adquiere por intenet y se instala en el ordenador sin apenas conocimientos, y en un portátil podemos encontrarnos con más de una sorpresa. No compre ningún recambio para su portátil si no está seguro de que es compatible.
- Por último, existe una modalidad reciente, los All in One, que se encuentra a caballo entre los portátiles y los sobremesa. Es fácil de transportar, no requiere de espacio para la caja de la CPU ni de cablear la mesa. También han heredado algunos vicios de los portátiles, como los problemas de sobrecalentamiento, o la dificultad de reparación.