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Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Miér Sep 27, 2023 8:22 am
Laberinto escribió:
Tinajas escribió:
Tengo esperanza de que Feijoo haga hoy a las 12 en el Parlamento un discurso reconciliador, donde la igualdad, la libertad sea su discurso principal, que Catalunya y Euskadi se sientan libres para que democráticamente alcancen sus deseos, haga una protección y fuerza para que nadie pierda el trabajo, y sea no solo un derecho, sino que incluso este protegido en caso de desempleo, la derogación de las leyes restrictivas como la ley Mordaza, el aumento del presupuesto en mejora de la sanidad pública, las becas de estudio, libros o comedor aumenten sus presupuestos , las ayudas sociales, potenciar la investigación, el desarrollo y la innovación empresarial, renovar el Poder Judicial, perseguir y conseguir con controles férreos tanto políticos y judiciales la corrupción, y sobre todo que nos diga cómo se puede conseguir esto no subiendo los impuestos sobre todo a los que más tienen. Jooooooeeeeerrrrr que sueño he tenido xd. Incluso le votaría.
Martín Luther Tin...ajas!!!!
No vayas hacia la luuuz...
Tranquilo...creo que ha dicho las mismas mentiras de siempre...no tendrás que votarle
Laberinto
Lo que he notado ayer es que ha regañado y se ha peleado con todos, vamos que ha ido a la investidura a hacer amigos
Tinajas Moderador
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Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Miér Sep 27, 2023 4:19 pm
Feijoo ha perdido la investidura, 172 a favor y 178 en contra, el viernes volvera a intentarlo.
el.loco.lucas Administrador
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Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Miér Sep 27, 2023 4:39 pm
Tinajas escribió:
Feijoo ha perdido la investidura, 172 a favor y 178 en contra, el viernes volvera a intentarlo.
Están como locos para comprar 4 votos. Otro Tamayazo....
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marapez V.I.P.
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Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Miér Sep 27, 2023 4:43 pm
Tinajas escribió:
Laberinto escribió:
Martín Luther Tin...ajas!!!!
No vayas hacia la luuuz...
Tranquilo...creo que ha dicho las mismas mentiras de siempre...no tendrás que votarle
Laberinto
Lo que he notado ayer es que ha regañado y se ha peleado con todos, vamos que ha ido a la investidura a hacer amigos
Aitor Esteban también lo ha notado...
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el.loco.lucas Administrador
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Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Miér Sep 27, 2023 5:26 pm
Todo el mundo tiene claro que se ha presentado a su "investidura" para hacer una moción de censura a la de Sánchez. Patético.
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Manué V.I.P.
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Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Jue Sep 28, 2023 6:17 pm
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marapez V.I.P.
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Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Jue Sep 28, 2023 9:46 pm
Señor Feijóo, ¿se ha fijado en que lleva una ballena colgada del cuello?
Aitor Esteban no se esperaba subir a la tribuna tan pronto y se sorprendió cuando la presidenta de la Cámara le concedió la palabra. Primero, sorprendido y, de inmediato, mosqueado. Alberto Núñez Feijóo había pasado de responder a la intervención de la portavoz de EH Bildu, con lo que se deducía que pretendía hacerlo a los dos al mismo tiempo. La cosa empezaba tensa entre él y el PNV, quizá la subtrama más interesante de la segunda jornada de la investidura de Feijóo. También estaba la primera votación –con 178 votos en contra y 172 a favor–, pero el resultado ya lo sabía todo el mundo empezando por el candidato. Esteban se aplicó desde el primer momento a dejar las cosas claras. Afirmó que el PNV ha tratado a Feijóo “con respeto” y claridad desde el verano. No ha jugado a poner precio a un hipotético apoyo ni a marear con mensajes contradictorios. Fue un 'no' desde el primer momento. En su discurso, desactivó la ficción en la que se ha movido la derecha esta semana. El trampantojo consistía en sostener que Feijóo habría podido ser presidente si hubiera concedido a Junts lo que pedía, por la amnistía y el referéndum, cuando esa opción nunca existió. De haberse producido, evidentemente Vox hubiera retirado su apoyo a Feijóo. “El PP no puede pretender hacer creer ni al PNV ni a la opinión pública que Vox no está en la ecuación”, explicó Esteban. Ahí fue donde apareció un animal de varias toneladas en el argumento: “Hay una ballena en la piscina. Los 33 votos de Vox son imprescindibles (para Feijóo). Además, esos 33 votos seguirían siendo imprescindibles durante la legislatura. La ballena tiene un tamaño imposible de esconder”. Si ya es complicado ocultar al elefante en la habitación –la expresión más citada para estos casos–, cómo será lo de la ballena. Feijóo ya había renunciado a conseguir el apoyo del PNV. Lo que sí quería hacer era castigar a ese partido por la negativa, además de cobrarse una venganza en diferido por lo que hicieron los nacionalistas en la moción de censura que expulsó del poder a Rajoy en 2018. Ahí fue donde el debate comenzó a ponerse interesante. El que fue presidente de la Xunta durante doce años siempre ha presumido de que conoce bien al PNV y de tener buenas relaciones personales con sus dirigentes. Si eso es cierto, que puede serlo, sorprende que su lectura de la política vasca esté desconectada de la realidad. Quizá él mismo no se la crea, pero sabe que su partido podría salir beneficiado. Su premisa es que el apoyo al Gobierno de Pedro Sánchez le está pasando factura en Euskadi al PNV. En las dos citas electorales de este año, ha sufrido una hemorragia de votos que le ha dejado en un estado de perplejidad que no sentía desde los tres años y medio que pasó en la oposición durante el Gobierno de Patxi López entre 2009 y 2012. Perdió un escaño en Bizkaia, lo nunca visto, y quedó por detrás del PSOE en toda Euskadi y sólo con mil votos más que Bildu. Quizá sea exagerado pensar que los burukides se han encerrado en los batzokis para ahogar las penas con un trasiego constante de botellas y sin tener claro qué está pasando. Pero son difíciles de entender declaraciones como las de Iñigo Urkullu hace unos días en el Alderdi Eguna quejándose del alto número de huelgas, como si fuera un empresario reaccionario. “¡Ya está bien de crear un malestar artificial!”, dijo enfurecido el habitualmente sobrio lehendakari. La sanidad pública, auténtica joya de la corona vasca, no ha sobrevivido muy bien a la pandemia y eso ha dañado la imagen de gestión que concedía al PNV una ración extra de votos. Ha ocurrido lo mismo en otras comunidades autónomas sin causar desgaste al Partido Popular en uno de esos enigmas de la sociología electoral, pero en Euskadi esas listas de espera han tenido consecuencias políticas. La versión oficial del partido por boca de su presidente, Andoni Ortuzar, es que sus votantes decepcionados se han refugiado en la abstención y que no han huido a otros partidos. Es una forma de consolarse, no de entender la realidad. El PNV tiene previsto volver a presentar a Urkullu a las elecciones de 2024. Su figura da muestras de desgaste tras casi once años en Ajuria Enea, pero no parece que el partido cuente con un relevo por el que merezca la pena apostar. Frente a la idea de que las razones de la pérdida de votos del PNV están en Euskadi –a lo que hay que sumar el ascenso de EH Bildu, muy beneficiada por dar prioridad a los derechos sociales sobre las aspiraciones nacionalistas–, Feijóo sueña con pensar que están en Madrid, y de ahí la referencia al alto precio por el apoyo a Sánchez. “Buena parte de su base social es la nuestra”, se atrevió a decir el líder del PP el miércoles. Escuchó risas en el hemiciclo e insistió: “No se rían”. Suena osado, aunque hay una cierta base en su afirmación. En el pasado, el PNV ha recibido votos en las elecciones autonómicas que en otros comicios podían volver al PSOE o al PP. Sin embargo, el título de propiedad que alega Feijóo es muy discutible. El PP ha sufrido un hundimiento electoral en Euskadi desde la desaparición de ETA que en realidad empezó años atrás. Desde los 326.933 votos en las autonómicas de 2001, fue cayendo en picado pasando por los 146.148 en 2009 y 107.771 en 2016. Tocó fondo cuando Pablo Casado tuvo la idea de resucitar a Carlos Iturgaiz y el PP se dio de bruces contra el suelo con 60.299 votos en 2020. Muchos votantes vascos del PP lo tuvieron claro. El principal freno a la izquierda abertzale era el PNV. Sólo Bildu podía poner en peligro la hegemonía del partido de Urkullu en la política vasca. Las elecciones generales de julio le han concedido un cierto efecto rebote: 131.789 votos, en la línea de los que sacó en las autonómicas de 2012. Feijóo relacionó los problemas del PNV con lo que ha ocurrido en Madrid. Llama la atención que un antiguo dirigente periférico se sume al pensamiento único que dicta que lo único que importa es lo que sucede dentro de la M30. “El blanqueamiento de Bildu (por Sánchez y los socialistas) tiene un objetivo. El de sustituirles a ustedes”, le dijo a Esteban. ¿Por qué no suena nuevo ese augurio? Porque es lo que decían Pablo Casado y la derecha mediática en 2020. “Bildu rentabiliza el blanqueo de Sánchez”, afirmaron entonces para explicar el ascenso de EH Bildu. Si el PSOE tuviera ese objetivo, se habría mostrado abierto a pactar con la coalición que dirige Arnaldo Otegi. No ocurrió ese año ni parece que vaya a ocurrir en 2024 incluso si Bildu supera en votos al PNV. No podría gobernar con la oposición del PNV, el PSOE y el PP. Feijóo cumplió con lo que su partido esperaba de él al enfrentarse por razones diferentes al PNV y, con especial dureza, a Bildu. El líder del PP suscribió por completo el mensaje habitual en el Sector Txapote del partido, por el que ETA sigue existiendo o bien Bildu es lo mismo que ETA. “Ustedes hablan de derechos de los trabajadores. ¿Ustedes a cuántos trabajadores se cargaron?”, dijo al grupo de Bildu. Dos de sus seis diputados se manifestaron en la calle contra ETA. Un tercero abandonó durante casi veinte años las listas electorales de la izquierda abertzale por los asesinatos de concejales del PP y el PSOE y sólo volvió a ser candidato con el fin de la violencia terrorista. Es indudable que tanto Oskar Matute como Jon Iñarritu arriesgaron más en la lucha contra ETA que Feijóo, que dedicó esos años a ascender escalones en la Administración gallega con la ayuda de buenos padrinos. Bildu como coalición sólo pudo existir después del fin de ETA. Ese hecho indudable no interesa al PP. Son minucias para el ala dura del partido para la que invocar el nombre de un terrorista como Txapote con el fin de ganar unos votos es una táctica de marketing imbatible. Esta semana, la presidenta de Baleares enseñó en la Asamblea una foto de Josu Ternera con la intención de criticar a los socialistas. Feijóo volverá a salir derrotado el viernes en la segunda votación de la investidura. Sí ha conseguido estos días obtener un botín precioso. Ha reforzado su posición en el partido y no prevé sustos internos en los próximos meses. Hasta Cayetana Álvarez de Toledo lo elogió por sus discursos. Tocará cerrar filas frente a las negociaciones de Sánchez para formar Gobierno. Si Feijóo es tan duro como el Sector Txapote y Díaz Ayuso, seguro que le aceptarán con la esperanza de que estemos ante una legislatura corta. Al final del pleno y antes de la votación, Feijóo se fue directo a los escaños del PNV para tener unas palabras con gesto distendido y todos echaron unas risas. El gallego parecía decir a los vascos que no había nada personal en esos ataques. Mientras tanto, la ballena había abandonado la piscina y se paseaba por los escaños. Todo el mundo pudo verla.
En Venecia es pura poesía: góndolas sobre el fango es la imagen romántica de las grandes mareas bajas. Donde no es Venecia, todo es más prosaico, cuando bajan mucho las aguas por las mareas, desaparece la imagen de postal que tenemos del mar para ver que debajo de tanta belleza, abundan anclas, bicicletas, lavadoras, ruedas, carritos de super, trampas y más trampas ocultas, trastos viejos inservibles hasta ahora invisibles. En política pasa algo similar cuando hay aguas vivas –que no pueda haber un gobierno de derechas lo es–: aflora la confrontación, tensión, crispación, peleas por el poder; cuando baja la marea política solo aparecen trastos viejos, en casi todas las esferas de la carcunda de un país, expresada con gran acritud en ciertas instituciones del Estado, antiguas, supervivientes sin merecerlo en el Estado democrático: políticos antiguos aferrados al poder, poderes como el judicial, siempre inadaptado a las reglas de la democracia, nobleza de toga predemocrática, las Fuerzas Armadas, siempre sin civilizar, entiéndase en el sentido constitucional, es decir, sujetas al poder ejecutivo y civil, los cuerpos y fuerzas de seguridad, la Iglesia, aún anclada en un estatus que no les corresponde en un Estado con aconfesionalidad constitucional. Todos esos artefactos, ocultos cuando la marea es tranquila y no se presienten amenazas, afloran como fragmentos y reliquias del pasado preconstitucional cuando las aguas tienen la viveza de la democracia- digamos que en tiempos de investidura- y dejan de jugar su papel constitucional para convertirse en amenazantes agentes de tiempos autoritarios. Cuando vuelva la calma, espero, no deberíamos olvidarnos de los detritos de las mareas bajas. Esos detritos son la consecuencia de una transición impuesta en una transferencia obligada del poder pero no sincera ni mucho menos leal. La Transición en la que dicen los antiguos que aún vivimos, ya ha dado todo lo que puede dar de sí, debería de haber acabado. Es justo reconocer sus méritos y la dificultad de hacer lo que se hizo con las presiones de los herederos del régimen anterior pero también conviene tener presente y reflexionar sobre si esas corrientes profundas que sufrimos ahora no son la consecuencia de una Transición incompleta. Si todo sigue atado y bien atado, el papel de un demócrata debe ser contribuir a romper el nudo gordiano que inmoviliza la democracia e impide el alumbramiento de una segunda Transición que permita avanzar en derechos y libertades de la ciudadanía, que recupere la Constitución territorial y sus consensos e impida la regresión a tiempos preconstitucionales.
Mientras hay mareas vivas, y eso ni es malo para la democracia como tampoco que veamos nuestras propias miserias en los fondos, en el fango, es normal esta gran marea baja en la que difícilmente se puede navegar. Pero la naturaleza es sabia y, con frecuencia, tras las pestilentes mareas de fango, llegan los macareos. La corriente remonta aguas arriba con olas de vigor y trae vida y frescura. Si los demócratas de este país quieren y sus representantes políticos así lo ven, el macareo, la ola capitana de un nuevo gobierno progresista debe apuntar a una Segunda Transición; el papel de los antiguos y sus caballerizos, anclados en el pasado y sus privilegios heredados nos lo demuestra cada día que pasa.
Todos esos artefactos, ocultos cuando la marea es tranquila y no se presienten amenazas, afloran como fragmentos y reliquias del pasado preconstitucional cuando las aguas tienen la viveza de la democracia- digamos que en tiempos de investidura- y dejan de jugar su papel constitucional para convertirse en amenazantes agentes de tiempos autoritarios. Cuando vuelva la calma, espero, no deberíamos olvidarnos de los detritos de las mareas bajas. Esos detritos son la consecuencia de una transición impuesta en una transferencia obligada del poder pero no sincera ni mucho menos leal. La Transición en la que dicen los antiguos que aún vivimos, ya ha dado todo lo que puede dar de sí, debería de haber acabado. Es justo reconocer sus méritos y la dificultad de hacer lo que se hizo con las presiones de los herederos del régimen anterior pero también conviene tener presente y reflexionar sobre si esas corrientes profundas que sufrimos ahora no son la consecuencia de una Transición incompleta. Si todo sigue atado y bien atado, el papel de un demócrata debe ser contribuir a romper el nudo gordiano que inmoviliza la democracia e impide el alumbramiento de una segunda Transición que permita avanzar en derechos y libertades de la ciudadanía, que recupere la Constitución territorial y sus consensos e impida la regresión a tiempos preconstitucionales.
Mientras hay mareas vivas, y eso ni es malo para la democracia como tampoco que veamos nuestras propias miserias en los fondos, en el fango, es normal esta gran marea baja en la que difícilmente se puede navegar. Pero la naturaleza es sabia y, con frecuencia, tras las pestilentes mareas de fango, llegan los macareos. La corriente remonta aguas arriba con olas de vigor y trae vida y frescura. Si los demócratas de este país quieren y sus representantes políticos así lo ven, el macareo, la ola capitana de un nuevo gobierno progresista debe apuntar a una Segunda Transición; el papel de los antiguos y sus caballerizos, anclados en el pasado y sus privilegios heredados nos lo demuestra cada día que pasa.
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Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Lun Oct 02, 2023 2:15 pm
La asociación conservadora de fiscales pide a la Unión Europea que intervenga contra una ley de amnistía que aún no existe
Los fiscales han enviado una carta pidiendo a los comisarios europeos Jourová y Reynder que iadviertan preventivamente a España y que en caso de aprobarse una amnistía a los encausados por el procés de Cataluña se intervenga para “garantizar el cumplimiento de los estándares europeos”
La Asociación de Fiscales (AF), la mayoritaria en la carrera fiscal y de ideología conservadora, ha enviado una carta a los comisarios europeos Vera Jourová y Didier Reynders en la que pide que adviertan preventivamente a España sobre aprobar una amnistía a los encausados por el procés que no han sido juzgados, y piden que si finalmente se aprueba, la UE intervenga para “garantizar el cumplimiento de los estándares europeos” en España, apuntando incluso al procedimiento sancionador que se ha activado con Hungría y Polonia.
La carta, que fuentes comunitarias confirman que se ha recibido en Bruselas, expone que, “de concederse esa amnistía, se estaría poniendo en cuestión toda la arquitectura jurídico institucional y, en definitiva, el Estado de Derecho en España. ”Lo que exigiría, a nuestro juicio, la intervención de los órganos correspondientes de la Unión Europea, a fin de garantizar el cumplimiento de los estándares europeos en esta materia“, dice la AF.
Y ello, señala, “sin descartar lo dispuesto en el artículo 7, en relación con el artículo 2, del Tratado de la Unión Europea (TUE)”, que contempla la posibilidad de que “se suspendan determinados derechos derivados de la aplicación de los tratados al Estado miembro de que se trate, incluidos los derechos de voto”, si se constata “un riesgo claro de violación grave” de los principios y valores comunitarios.
La AF también solicita que, en ese escenario, “se pondere la aplicación del Reglamento (UE) 2020/2092 del Parlamento Europeo y del Consejo de 16 de diciembre de 2020 sobre un régimen general de condicionalidad para la protección del presupuesto de la Unión, en virtud de lo dispuesto en el artículo 1 del mismo, relativo a la protección del presupuesto de la UE en caso de vulneración de los principios del Estado de Derecho de los estados miembros”.
No obstante, como punto de partida, la AF urge a los comisarios europeos a instar a España a que “se abstenga de promover una ley de amnistía como la pretendida, al entender que pone en situación de grave riesgo el Estado de Derecho en España por ser contraria a los principios de separación de poderes y de independencia judicial y, por lo tanto, por quebrantar algunos de los valores esenciales de la Unión Europea”.
Una ofensiva de la derecha judicial
Aunque no hay ningún borrador ni texto preliminar —al menos, que se haya hecho público—, la derecha judicial lleva semanas en pie de guerra contra una hipotética amnistía de la que por ahora no se conoce ningún detalle. Desde el presidente del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Vicente Guilarte, a las asociaciones de jueces y fiscales conservadoras, todos se han posicionado ya en contra.
En el ámbito de la Fiscalía, las principales objeciones las inició la AF, que ahora ha enviado la carta a la Comisión Europea. Su presidenta, Cristina Dexeus, ha dado en los últimos días varias entrevistas en las que ha cargado duramente contra el posible alivio penal del procés. “El Estado de Derecho peligra porque hacer concesiones de este tipo a quienes han atentado contra la Constitución es ponerse a su lado, y por tanto, contra la Constitución y el Estado de Derecho”, dijo el pasado 8 de septiembre en una entrevista en Confilegal. “El ser independentista no puede suponer una patente de corso para cometer delitos, que es lo que pretenden con la amnistía”, añadió.
El concepto de "independencia del Poder Judicial" debería incluir que jueces y fiscales no hicieran política.
marapez V.I.P.
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Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Lun Oct 02, 2023 2:31 pm
el.loco.lucas escribió:
El concepto de "independencia del Poder Judicial" debería incluir que jueces y fiscales no hicieran política.
Debería
Manué V.I.P.
Mensajes : 8620 Localización : lugar donde se localiza algo
Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Lun Oct 02, 2023 5:20 pm
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Tinajas Moderador
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Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Mar Oct 03, 2023 4:44 pm
El rey propone a Pedro Sanchez como candidato a la investidura de probable presidente del gobierno.
marapez V.I.P.
Mensajes : 46415
Tema: Re: ¿Y Ahora qué? Vie Nov 10, 2023 12:27 am
Abróchense los cinturones
Luego no digan que no fueron avisados. Esto empieza de verdad y vienen curvas y turbulencias nunca vistas. Agárrense lo más fuerte que puedan. No es un pacto de investidura sino de legislatura y eso aún molesta más. La derecha ya avisa que le tirara todo cuanto encuentre a mano. El rey, el poder judicial, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado y el ejército, Isabel Díaz Ayuso no se ha dejado a nadie en la lista de instituciones arrojables al tirano Sánchez; lo que haga falta. En la pandemia se pedía unas cañas, ahora reclama barra libre de Lawfare. No lo tenían fácil Junts y Carles Puigdemont después de que Oriol Junqueras y ERC le hubieran birlado en línea de meta los temas estrella de la negociación. Selladas la amnistía, Rodalies y la deuda, quedaba poco apetitoso y llamativo que firmar. Pero ha administrado con habilidad lo más valioso que le dejaron: el tiempo. Importa qué se firma, pero también el orden en que se firma. Puigdemont se ha asegurado dejar claro quién ha marcado los tiempos y que, sin su acuerdo, todo lo conseguido por Esquerra era y será papel mojado. Esta legislatura no va a ser como la anterior porque ahora también juega él; ese fue el mensaje clave de su comparecencia. Lograr una ampliación de los plazos y el alcance de la amnistía, la mención a la evidencia de la existencia de un lawfare contraindependetista y el reconocimiento de un verificador neutral que ayude a restablecer la confianza son los extras que embellecen el pacto. Durante los días más tensos de los años del procés, fueron mayoría las voces que reclamaban que se hiciese política para resolver un problema político. Hoy esa mayoría puede constatar que regresamos a ese camino. Volvemos a donde nunca debimos irnos y adonde todos –incluso aquellos que se oponen– sabemos que debemos estar si queremos salir de este bucle. El acuerdo entre Junts y el PSOE certifica un compromiso entre partidos políticos que mantienen sus discrepancias y no renuncian a sus objetivos; pero se comprometen a negociar las soluciones: la buena vieja política de toda la vida. Lo importante de los acuerdos, con ERC y especialmente con Junts, no reside tanto en su contenido como en su significado. Lo relevante es el compromiso de todas las partes de renunciar a imponer sus posiciones y dialogar y negociar los desacuerdos como método para encontrar las soluciones.
Escuchar a Feijóo meter en la misma frase de agravios imperdonables la igualdad, los impuestos, la dignidad, el estado de derecho y los trenes resulta hasta un poco cómico. La quita de la deuda era cuestión de tiempo porque es lo mejor para todo el sistema autonómico y lo saben todos los presidentes. El traspaso de la estructura ferroviaria de cercanías a los territorios que las usan y las padecen parece de primero de gestión descentralizada. La pregunta no es por qué se hacen ahora sino por qué no se han hecho antes. Quienes reclaman un relato que defienda la amnistía ya lo tienen: sin amnistía la vuelta a la política resulta imposible. Sin dar las cuentas por saldadas y cerrar ese capítulo de manera definitiva, no puede haber soluciones que negociar; solo quedan cuentas que ajustar. Cambiar amnistía y compromiso político por gobierno y negociación política me parece un buen trato.