Dolores de cabeza constantes, fatiga, debilidad, hinchazón de abdomen y piernas, sensibilidad en los senos, problemas para dormir, ansiedad o depresión, aislamiento. Todo esto justo 10 ó 12 días antes del inicio de la menstruación. Y luego, al llegar la menstruación, viene una dolencia fuerte en la parte baja del abdomen. Dos días después todo síntoma desaparece como por arte de magia.
“Un 80% de las mujeres experimenta algún síntoma previo a la menstruación, que, por lo general, es débil o moderado y no interfiere con sus actividades”, dijo el ginecólogo Alejandro Villalobos. Sin embargo, los expertos indican que algunas mujeres (del 3% al 8%) sufren síntomas tan fuertes que impiden su rutina normal. Esto se conoce como trastorno disfórico premenstrual.
Las hormonas
Los orígenes del SPM y del trastorno disfórico pueden vincularse con desequilibrios en el estrógeno y la progesterona, hormonas femeninas.
“El estrógeno produce una sustancia llamada catecol-estrógeno, que altera los centros nerviosos en el cerebro. Esta sustancia llega al hipotálamo, ahí hay células que tienen a su cargo estímulos (gaba), que si están obstruidos producen ansiedad, o ira”, añadió el ginecólogo Danilo Medina.
Sistema nervioso
Según una investigación en ‘BioPsychoSocial Medicine’, mujeres con trastorno disfórico premenstrual padecen del sistema nervioso central. “Puede atribuirse al funcionamiento alterado del sistema nervioso autónomo en la fase lútea del ciclo menstrual”', afirmó Tamaki Matsumoto, investigadora.
“En EE.UU., un estudio con mujeres presas por homicidio mostró que todas asesinaron en días previos a su menstruación. Quizás sufrían del trastorno disfórico premenstrual”, mencionó Medina.