Por fin oigo esto en las declaraciones de un político: “Hay que derogar los cupos vasco y navarro”. Y ha tenido que ser un socialista, Ximo Puig. Jamás creí que así fuera, pero así ha sido. El PSOE se ha pronunciado en contra de los escandalosos privilegios forales de estas dos regiones por boca del secretario de los socialistas valencianos.
Pero… ¿será todo tan sencillo y verdadero? Yo que tiendo a la desconfianza hacia esta gente, colijo que hay algo de juego trilero por parte de los expertos en este oficio. Me temo que, como andan faltos de credibilidad y de votos, se lanzan a la fácil demagogia y cada cual dice lo que conviene allí donde conviene.
Si el PP fuese algo menos ingenuo, más ladino y casi tan tramposo como el PSOE les pondría el cebo, pillándole la palabra a este Ximo.
Venga, vale vamos a juntarnos, a coger el rábano por las hojas, la mecha que el don Ximo ha encendido y a ver como lo hacemos. Y los sociatas inmediatamente sufrirían un ataque de colitis temblorosa y Rubalcaba y Elena Valenciano que fue la que un día defendió esta aberrante desigualdad fiscal dentro de una Nación a favor de las dos comunidades, dirían que no, que eso es solo la opinión de un señor porque su partido es múltiple, plural, democrático y rayano en la perfección.