Pocos lugares en el mundo ofrecen la posibilidad de observar en su ámbito natural tanta cantidad de animales

Península Valdés, sobre el mar Atlántico, y a 77 kilómetros de Puerto Madryn, es uno de ellos. Gigantescas ballenas a unos pocos metros, lobos y elefantes marinos, pingüinos, numerosas aves, guanacos y otras especies terrestres se concentran en esta Reserva Natural de 360 mil hectáreas en donde casi no hay más habitantes y estrellas que estos.

Tan destacable es la población faunística, que la Unesco declaró a este sitio "Patrimonio de la Humanidad".

La entrada a la península ya es un deleite para los sentidos. Luego de tomar la Ruta Provincial 2, desde la Ruta 3 o desde Puerto Madryn, se llega al itsmo "Carlos Ameghino" que conecta a la península con el continente, y donde el agua flanquea los dos costados del camino.

Tanto a la derecha como a la izquierda se puede ver la inmensidad azul del mar patagónico. De un lado, el Golfo Nuevo, y sobre el otro el Golfo San José. Si se baja el vidrio del auto, hasta se pueden oír los chirridos de las ruidosas aves que habitan cerca, en la Isla de los Pájaros, y que parecen dar la bienvenida al lugar.

Justo en ese punto, puerta de acceso a la Reserva Integral de la Península Valdés, hay que parar para abonar una entrada. Allí se encuentra el Centro de Interpretación F. Ameghino y el Museo Regional Fuerte San José, ideal para informarse a fondo sobre los lugares a visitar y su geografía, flora, fauna e historia.
Desde aquí se puede hacer un pequeño desvío y visitar la Isla de los Pájaros o seguir adentrándose en la península.

Después de unos 25 kilómetros que se hacen sobre una típica estepa, se abre de repente un abanico celeste entre acantilados dorados. Esta magnífica vista corresponde a Puerto Pirámides, el único asentamiento poblacional de la reserva y uno de los lugares más privilegiados para observar a las famosas ballenas francas del sur. Estos gigantescos mamíferos llegan al sur en junio y hasta diciembre habitan las aguas del golfo para procrear y dar a luz a sus crías.

Las finas y doradas arenas de Pirámides invitan a sentarse en ellas y, simplemente, mirar el mar o alguna que otra ballena cerca de la costa, o recorrer toda la playa en búsqueda de los caracoles mas raros. Desde allí se puede seguir viaje hacia las distintas reservas faunísticas o contratar una excursión en buceo. Pero lo que pocos se pierden son los avistajes cercanos de ballenas.

Península de Valdés

La Península de Valdés es una península que queda en la costa patagónica de Argentina, en la porvincia de Chubut. Es uno de los principales puntos turísticos del país por su belleza natural y por ser uno de los mejores puntos del mundo donde se puede avistar ballenas.
El clima es frío en invierno y caluroso en vernano. La península tiene una gran reserva ecológica de animales. Entre su fauna se destacan los zorros, zorrinos, guanacos, armadillos, pingüinos de Magallanes, lobos marinos, elefantes marinos, gaviotas, caranchos y sin duda las ballenas.

Peninsula de Valdez...
Espectacular vida salvaje en la Patagonia

Peninsula de Valdez esta ubicada sobre la costa Atlantica en la provincia de Chubut, Patagonia, Argentina, a mitad de camino entre Buenos Aires y Tierra del Fuego.

Se introduce en el mar formando dos golfos de aguas tranquilas, con pronunciados acantilados y grandes rocas con abundancia de mamíferos marinos y terrestres.

Península de Valdez es uno de los lugares de reproducción mas grandes del mundo.

Lo que podrás ver en Peninsula de Valdez es asombroso...

Recorriendo la Península de Valdez, Argentina

La península de Valdez, situada la punta nordeste de la provincia de Chubut, Argentina. Es una pequeña franja de apenas 35 kilómetros de largo, que se caracteriza por contener una fauna marina especial, conocida por todo el mundo, y declarada por la UNESCO en 1999 patrimonio de la humanidad.

Es el lugar elegido año tras año por la ballena Franca para su reproducción, la cual podrá observar entre los meses de junio y diciembre. También tienen frecuentes visitas de las orcas en febrero y mayo a las playas.

Las toninas y los delfines pueden verse durante todo el año. Es un lugar de ensueño donde las aguas cristalinas dan la sensación de dos cielos . Se puede realizar trekking , mountain bike , pesca deportiva, buceo entre otras cosas. Está muy bien preparado para el turismo y ofrece también distintas posibilidades para el hospedaje. Desde hoteles de lujo a pequeñas cabañas para cortas estadías.

El clima se caracteriza por ser seco, con gran amplitud térmica; en invierno varía entre 15 y -15 grados en un mismo día.

En las estaciones calidas el clima es más acogedor. En el día se disfrutan entre 20 y 40 grados mientras que en la noche 20 a 25.

Se pueden conseguir distintos tipos de paquetes turísticos que tienen como atractivo este lugar de ensueño. La península esta incluida dentro de un tour donde se pueden ver distintos tipos de paisajes y fauna. Como Puerto Madryn, la reserva de las aves y el Parque Marino entre otros.

La Península de Valdez es un destino recomendable para visitar tanto en familia como con amigos, ya que ofrece una amplia variedad de actividades para que disfrute sus vacaciones de la mejor manera posible

Puerto Pirámides

Puerto Pirámides está enclavada en la Península Valdés, situada en el extremo nordeste de la provincia de Chubut. Este rincón de la estepa patagónica contrasta con las aguas del Atlántico que golpean sobre los acantilados de la costa.

La Península Valdés, declarada Patrimonio Natural de la Humanidad en 1999, es una estrecha franja de tierra de apenas 35 kilómetros de largo, con suelo árido y las salinas más profundas de Sudamérica. Sus características ecológicas son el escenario indicado para una singular riqueza de fauna marina reconocida en todo el mundo.
Es el lugar elegido por la ballena franca para su reproducción y alumbramiento. Todos los años, de junio a diciembre, pueden observarse estos increíbles animales que brindan un espectáculo único. A su vez, las orcas llegan frecuentemente entre febrero y mayo a las playas, y los delfines y toninas se pueden admirar en cualquier estación.

En este paradisíaco escenario natural, a 27 kilómetros del istmo Carlos Ameghino, se encuentra Puerto Pirámides, un pueblo de mar que posee aguas cristalinas y paisajes agrestes. Sus playas de suave declive están protegidas por acantilados de formas similares a las pirámides, lo cual explica su nombre. En estas formaciones se han hallado gran cantidad de restos de invertebrados fosilizados, con una antigüedad de aproximadamente 9 millones de años.

Puerto Pirámides es la única población estable dentro de la península Valdés. Recibe a miles de turistas por año para mostrar su monumento natural más importante: la ballena franca austral. Cuenta con la infraestructura necesaria para recibir a los visitantes que buscan aventura y contacto con la naturaleza. Además del avistaje de ballenas, se puede realizar buceo, windsurf, velerismo, pesca deportiva, trekking, mountain bike y sandboard.

De clima seco, las lluvias apenas alcanzan los 200 milímetros anuales. En invierno, los días ofrecen temperaturas de 15ºC, las cuales descienden, por las noches, a -10ºC. En cambio, durante la primavera y el verano en Península Valdés los días registran entre 20 y 40ºC, mientras que las noches frescas presentan de 20 a 25ºC.

Desde Buenos Aires hay vuelos diarios hasta la ciudad de Puerto Madryn y desde allí sale un servicio de transporte directo hacia Puerto Pirámides. Por vía terrestre se accede por la Ruta Nacional 3.
La Península Valdés es un área protegida, por lo que se debe pagar un canon de acceso que ronda los $10 para los adultos nacionales y los $35 (pesos argentinos) para los extranjeros.

Península de valdez

El avistaje de la Ballena Franca Austral en la Península de Valdés, Patagonia Argentina. es un espectáculo que cada año convoca a muchos visitantes que llegan a las ciudades de Puerto Madryn, Rawson y la pequeña aldea de Puerto Pirámides, en la Península de Valdés (declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO).



Estos lugares de la Patagonia Argentina constituyen la entrada al extraordinario mundo de las ballenas, que cada año llegan a la Península de Valdez para realizar su eterno rito de apareamiento.



Por lo general, las ballenas del sur de Argentino son conocidas como la Ballena Franca Austral, un mamíferos perfectamente adaptados a la vida marina que pertenece a la especie de cetáceos y, dentro de este grupo, a las especies de mysticetos, que son los que no tienen dientes.

La Ballena Franca Austral se diferencia del resto de las ballenas por no tener el surco ventral y la aleta en su espalda, y además por el tamaño de sus cabezas, donde se destaca el maxilar largo y angosto ocupa casi una cuarta parte de su cuerpo. Otra característica típica de esta especie de ballena es el hecho de que al expulsar el aire un chorro de agua en forma de V que se puede ver desde muchos kilómetros de distancia.

En un recorrido por la meseta patagónica podremos gozar de sus mejores playas en la Península de Valdez, para apreciar lo más rico de la fauna marina. El placer que produce la observación de cetáceos disfrutando de un atardecer nos permitirá un viaje interior, las familias y colonias de pingüinos más grandes del mundo explican por qué este sitio ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad.

PENINSULA DE VALDEZ