Desconozco qué profesor ha tenido la mala ocurrencia de castigar a este niñato haciéndole repetir esta frase tantas veces.No soy partidario de castigos, y mucho menos a mentes tan tiernas e infantiles que le pueden ocasionar graves daños mentales, pero si se ha pretendido darle una lección, en vez de House ¿por qué no hacerle repetir "soy el más tonto del grupo"? El profesor hubiese acertado, y el alumno, quizás hubiese recapacitado que, para tantas bobadas, mejor quedarse en su casa; así, todo quedaba en familia.
Pero creo entender que aquí no ha habido ni profesor ni niñato, sino un resentido; un pusilánime; un cobarde; un tarado..., alguien que por lo que le digo me odiará hasta la muerte, pero si ante un caso como este no digo lo que he dicho, no me sentiría bien. Y esta clase de gente no me asusta nada, perro que ladra no muerde, y tanto ladrido demuestra que, más que morder, está dispuesto a lamer cualquier mano; menos la mía, que no se la ofrezco por mezquino y malapata.
Un saludo.
El Postiguet