"La ayuda de los estadounidenses fue inútil, tomaron la decisión equivocada", según un alto funcionario militar maliense.A EE.UU. le salió el tiro por la culata con su programa
antiterrorista en Mali: entrenados en la lucha contra los terroristas,
unidades militares del país desertaron y formaron las filas de los
extremistas islamistas, como los rebeldes tuaregs.
Según el diario ’New York Times’, en los últimos cuatro años Estados
Unidos llevó a cabo en la región un programa antiterrorista a gran
escala, invirtiendo entre 520 y 600 millones de dólares en el
entrenamiento de tropas en Mali. A los militares les enseñaron a
patrullar las fronteras y a neutralizar las emboscadas, entre otros
métodos de lucha contra el terrorismo.
Sin embargo, en marzo de 2012, después de que los islamistas bien
armados provenientes de Libia invadieran el norte de Mali, el general
Amadou Sanogo -entrenado por los instructores estadounidenses- encabezó
en el país el golpe de estado.
El rotativo precisa que los estadounidenses no sólo no vieron las
premisas para un golpe de estado, sino que tampoco tuvieron en cuenta
que el mando de las unidades de élite militares fue asignado a los
tuaregs, representantes de las tribus en conflicto con el Gobierno
central desde hace 50 años. Así, cuando el pasado mes de abril los
tuaregs proclamaron un estado independiente Azawad, tres de los cuatro
divisiones en el norte de Malí se pasaron al lado de los rebeldes.
"La ayuda de los estadounidenses fue inútil, tomaron la decisión
equivocada", comentó al diario uno de los altos funcionarios militares
malienses, que explicó que los militares “desertaron cuando más se les
necesitaba”, llevándose consigo tropas, armas, camiones y enseñando sus
habilidades adquiridas a los extremistas. "Fue un desastre", concluye.
Ahora Estados Unidos ha empezado a brindar apoyo en materia de
transporte y comunicaciones a Francia en el marco de la operación que
persigue expulsar a los islamistas del norte de Mali, en cuyas filas hay
algunos tuaregs entrenados por ellos mismos. La escalada de violencia
en el norte de Mali, ocupado por grupos separatistas, degeneró en una
resolución de la ONU que autorizó el pasado jueves un "despliegue
rápido" de la fuerza internacional a una carta con una solicitud de
ayuda enviada por el Gobierno de Bamako.
La intervención francesa en Mali: ¿cortina de humo para los problemas internos?Francia "debe empezar con la resolución de las disputas internas con sus minorías", opina el activista político John Rees.La intervención de Francia en Mali es solo una decisión política del
presidente francés, François Hollande, que tiene como objetivo distraer
del incumplimiento de sus promesas electorales, opinó ante RT el
activista político John Rees.
El activista subrayó que "hemos oído muchas veces" que París está
librando una guerra contra el terrorismo en Afganistán, Irak, Libia y
ahora en Mali, pero el resultado es justamente lo contrario de lo
esperado.
"No había tanta presencia de Al-Qaeda en Irak antes de la invasión
como ahora. Al-Qaeda no se había extendido a Pakistán antes de la
invasión en Afganistán como ahora", explicó Rees, subrayando que además
"la intervención en Libia ha llevado directamente a la propagación de
Al-Qaeda en Mali ahora".
El activista expresó que si los franceses quieren hacer algo de
verdad para reducir el antagonismo entre el Estado y la comunidad
musulmana, tanto en Francia como en el extranjero, deben empezar con la
resolución de las disputas internas con sus minorías. "Eso sería un paso
mucho más significativo que los bombardeos de otro país musulmán",
recalcó.
Además, Rees considera un error por parte del Gobierno de Mali
dirigirse en busca de ayuda a "las personas responsables desde los
tiempos coloniales de tanto desastre en esa parte del mundo". "Tan solo
una pequeña mirada al Norte y al Oriente nos explicaría que en Oriente
Próximo la atención constante de los poderes imperiales venía agravando
los problemas generación tras generación en vez de mejorar la
situación", concluyó.
El miembro del Colectivo Internacional Ojos para la Paz, Flavio
Signore, opina que el verdadero objetivo de la intervención militar en
Mali no es solo distraer la atención de los problemas internos, sino
también apoderarse de los recursos naturales. “Occidente claramente
utiliza estos grupos de rebeldes, los arma y los desarma a sus anchas,
los utiliza para desestabilizar a los países y después poder intervenir y
de alguna manera controlar su territorio, los recursos económicos”,
explicó.
Fuente: RT, 14-15 de enero de 2013.