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| Por una economía con rostro humano | |
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+4golondrina Liptuan Zweig Pur 8 participantes | |
Autor | Mensaje |
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Liptuan V.I.P.
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| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Miér Oct 16, 2013 8:48 pm | |
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| | | Tinajas Moderador
Mensajes : 41854 Localización : En cualquier parte del Universo
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Miér Oct 16, 2013 9:42 pm | |
| Si, el debate sube de nivel | |
| | | Liptuan V.I.P.
Mensajes : 14027
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Miér Oct 16, 2013 9:46 pm | |
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| | | Pur V.I.P.
Mensajes : 42595 Localización : remota
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Miér Oct 16, 2013 10:17 pm | |
| es que se va uno y llega el orto, perdón! el otro | |
| | | Pur V.I.P.
Mensajes : 42595 Localización : remota
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Miér Oct 16, 2013 10:21 pm | |
| - curtin escribió:
- Pur escribió:
- golondrina escribió:
- ¡Que bonito título!
¡Ay, se dejara de ser utopía, para pasar a ser la realidad! Yo creo que si (pensemos que alguna vez hubo un sistema feudal que era peor que lo que tenemos ahora), y lo creo también siguiendo tu reflexión del otro día (que ya no recuerdo en qué hilo estaba) sobre que las cosas cambian pero en tiempos que no condicen con nuestras necesidades. Es en verdad el problema de entender la ciencia económica como algo tan anquilosado y sistémico, en lugar de utilizarla como una herramienta más ágil para resolver problemas humanos.
Lo cierto es que no todo en el mundo es capitalismo salvaje, ni todos los ecónomos son neoliberales, hay muchos ecónomos como éste que podrían hacer grandes aportes y se los invisibiliza.
Saludos!. Yo le aconsejaría un diccionario para no caer en éstas ridículas piruetas lingüísticas absolutamente innecesarias con un idioma tan rico. La estulticia de los pretenciosos es la necedad encumbrada. no te leo, estás incivilizado, perdón! invisibilizado | |
| | | golondrina Experto/a
Mensajes : 1555 Localización : Al Sur, del Sur de Europa...
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Jue Oct 17, 2013 12:52 am | |
| - el.loco.lucas escribió:
- Os recomiendo un pequeño pero gran libro: "La economía del bien común" de Christian Felber. Una muy interesante propuesta para dejar de ser una sociedad al servicio de un sistema económico y pasar a tener un sistema económico al servicio de la sociedad.
Si, puede ser bueno; lo buscaré tambien. Gracias. | |
| | | Tinajas Moderador
Mensajes : 41854 Localización : En cualquier parte del Universo
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Lun Oct 21, 2013 7:24 am | |
| - Pur escribió:
- Yo creo que sí se puede y se debe creer en estas teorías desde la ideología. Si hay algo que quiere instalar el neoliberalismo es la anulación de la política para que la economía (totalmente liberalizada) rija los destinos de sociedades enteras (por ende la democracia no sirve de nada). De hecho una economía con rostro humano no puede ser otra cosa que una economía política. El trabajo de invisibilizar y acallar las voces de estos ecónomos, tiene que ver con eso, con censurar una cosmovisión política (expresada desde una teoría económica). Lo otro son recetas de técnicos que estudian índices.
Yo creo que hablamos de cosas distintas, el humanismo, el defender la pobreza se puede hacer sin necesidad de posicionarse en ideologías, sino en el ser humano, otra cosa es aplicar las formas de Justicia social desde las ideas en el poder, pues existen personas que no tienen ni idea de política, o al menos no saben cual es su partido que les represente, y abren su puerta y corazón a los mas pobres y débiles indistintamente de donde sean, y a eso me refiero, que quizás también nos equivocamos en eso, en que por encima de las ideas están las personas. | |
| | | Liptuan V.I.P.
Mensajes : 14027
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Lun Oct 21, 2013 9:27 am | |
| - Tinajas escribió:
- Pur escribió:
- Yo creo que sí se puede y se debe creer en estas teorías desde la ideología. Si hay algo que quiere instalar el neoliberalismo es la anulación de la política para que la economía (totalmente liberalizada) rija los destinos de sociedades enteras (por ende la democracia no sirve de nada). De hecho una economía con rostro humano no puede ser otra cosa que una economía política. El trabajo de invisibilizar y acallar las voces de estos ecónomos, tiene que ver con eso, con censurar una cosmovisión política (expresada desde una teoría económica). Lo otro son recetas de técnicos que estudian índices.
Yo creo que hablamos de cosas distintas, el humanismo, el defender la pobreza se puede hacer sin necesidad de posicionarse en ideologías, sino en el ser humano, otra cosa es aplicar las formas de Justicia social desde las ideas en el poder, pues existen personas que no tienen ni idea de política, o al menos no saben cual es su partido que les represente, y abren su puerta y corazón a los mas pobres y débiles indistintamente de donde sean, y a eso me refiero, que quizás también nos equivocamos en eso, en que por encima de las ideas están las personas. Estoy de acuerdo | |
| | | Pur V.I.P.
Mensajes : 42595 Localización : remota
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Lun Oct 21, 2013 12:46 pm | |
| - Tinajas escribió:
- Pur escribió:
- Yo creo que sí se puede y se debe creer en estas teorías desde la ideología. Si hay algo que quiere instalar el neoliberalismo es la anulación de la política para que la economía (totalmente liberalizada) rija los destinos de sociedades enteras (por ende la democracia no sirve de nada). De hecho una economía con rostro humano no puede ser otra cosa que una economía política. El trabajo de invisibilizar y acallar las voces de estos ecónomos, tiene que ver con eso, con censurar una cosmovisión política (expresada desde una teoría económica). Lo otro son recetas de técnicos que estudian índices.
Yo creo que hablamos de cosas distintas, el humanismo, el defender la pobreza se puede hacer sin necesidad de posicionarse en ideologías, sino en el ser humano, otra cosa es aplicar las formas de Justicia social desde las ideas en el poder, pues existen personas que no tienen ni idea de política, o al menos no saben cual es su partido que les represente, y abren su puerta y corazón a los mas pobres y débiles indistintamente de donde sean, y a eso me refiero, que quizás también nos equivocamos en eso, en que por encima de las ideas están las personas. No lo sé, creo que no te comprendo, pensé que hablabas de humanismo como sostén teórico político, no como conducta individual (en especial por el hilo en el que estamos "Economía con rostro humano"). La economía plantea un sistema, y toda acción vinculada al sistema (a conservarlo o a reformarlo) conlleva ideología. Tal vez manejamos conceptos distintos de ideología. Lo que hace individualmente cada persona (abrirle la puerta de su casa al pobre) no requiere inclusive siquiera de un soporte teórico llamado humanismo (es decir; lo puede hacer inclusive sin tener idea qué es tal cosa)... y aún así esa acción no cambia el sistema ni la situación de pobreza que provoca el sistema. | |
| | | Liptuan V.I.P.
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| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Lun Oct 21, 2013 12:56 pm | |
| Creo que Tinajas lo ha enfocado desde el término Ideología como doctrina. | |
| | | Pur V.I.P.
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| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Lun Oct 21, 2013 1:00 pm | |
| Ah ok, si es así entiendo mejor. | |
| | | Liptuan V.I.P.
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| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Lun Oct 21, 2013 1:04 pm | |
| A ver qué dice él, lo mismo me tira por tierra xD | |
| | | Tinajas Moderador
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| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Lun Oct 21, 2013 2:19 pm | |
| Si, así es, se puede pensar en un reparto de las riquezas y combatir la pobreza, no necesariamente desde una ideología o el poder que la sustenta, sino desde nuestra propia creencia de solidaridad hacia los más desfavorecidos, sea de forma personal, colaborando con ONG, religiones o asociaciones de ayudas, y tengo claro que si las personas fueran generosas indistintamente de las ideas que tuvieran se podría forzar a cualquier gobierno a aplicar la justicia social y la economía humanista.
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| | | Pur V.I.P.
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| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Lun Oct 21, 2013 2:33 pm | |
| No lo sé, no soy capaz de pensar los actos desvinculados de las ideas (sólo atravesados por las emociones, que es a lo que entiendo que te referís). No estoy de acuerdo (no sólo por lo idealista del asunto, sino porque el humanismo es un grupo de ideas, no de sentimientos). Y tampoco me gustan las dádivas ni el asistencialismo (las ONG's son la penosa evidencia de que la política no cumple su función, y ni hablar de las ayudas misericordiosas de las religiones, que dan migajas de pan mientras sostienen sus estructuras con lujo y opulencia).
De hecho hay muchas personas generosas (que le dan de comer al pobre o colaboran con ONG's), y que ni siquiera pueden (por motivos infinitamente variados) asistir a una manifestación en contra de los desahucios. | |
| | | Pur V.I.P.
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| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Mar Oct 22, 2013 10:27 pm | |
| - Tinajas escribió:
- Si, así es, se puede pensar en un reparto de las riquezas y combatir la pobreza, no necesariamente desde una ideología o el poder que la sustenta, sino desde nuestra propia creencia de solidaridad hacia los más desfavorecidos, sea de forma personal, colaborando con ONG, religiones o asociaciones de ayudas, y tengo claro que si las personas fueran generosas indistintamente de las ideas que tuvieran se podría forzar a cualquier gobierno a aplicar la justicia social y la economía humanista.
Viendo este video no pude más que pensar en este comentario tuyo A mí particularmente me hace ruido, no me gusta, pero es interesante y creo que tiene estrecha relación con tu idea de las cosas, planteada en este comentario. "El cómo y el por qué del Altruismo Eficaz" | |
| | | Liptuan V.I.P.
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| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Mar Oct 22, 2013 10:40 pm | |
| Yo creo que hay un error generalizado (yo lo cometía) de confundir "ideas", con "conjunto de ideas", con "ideología". | |
| | | Pur V.I.P.
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| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Mar Oct 22, 2013 10:55 pm | |
| Estoy leyendo otra vez después de 15 años el libro de Erich Fromm " ¿Tener o Ser?" y es impresionante observar que en 1976 (año en que fue escrito) las cosas que hoy ocurren ya ocurrían y estaban totalmente claras a la vista de muchos intelectuales (una no puede dejar de sentir cuando lee, ese abismo temporal real y a la vez la rara sensación de que nada cambió con el paso del tiempo). Voy a ir pegando fragmentos de la Introducción del libro (ya que encontré en PDF la misma versión que estoy leyendo en papel), porque aborda asuntos planteados en este hilo pero también en otros, acerca del individuo, la libertad, el individualismo, el egocentrismo, lo social o lo cooperativo, la felicidad y finalmente, el humanismo (siendo Fromm un exponente de la filosofía humanista, entre otras cosas). Creo que la síntesis que plantea en la Introducción, es perfecta. Pego el enlace al pdf online también: [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]______________________________________________________________________ INTRODUCIÓN: LA GRAN PROMESA, SU FRACASO Y NUEVAS OPCIONES
EL FIN DE UNA ILUSIÓN LA GRAN promesa de un Progreso Ilimitado (la promesa de dominar la naturaleza, de abundancia material, de la mayor felicidad Para el mayor número de personas, y de libertad personal sin amenazas) ha sostenido la esperanza y la fe de la gente desde el inicio de la época industrial. Desde luego, nuestra civilización empezó cuando la especie humana comenzó a dominar la naturaleza en forma activa; pero ese dominio fue limitado hasta el advenimiento de la época industrial. El progreso industrial, que sustituyó la energía animal y la humana por la energía mecánica y después por la nuclear, y que sustituye la mente humana por la computadora, nos hizo creer que nos encontrábamos a punto de lograr una producción ilimitada y, por consiguiente, un consumo ilimitado; que la técnica nos haría Omnipotentes; que la ciencia nos volvería omniscientes. Estábamos en camino de volvernos dioses, seres supremos que podríamos crear un segundo mundo, usando el mundo natural tan sólo como bloques de construcción para nuestra nueva creación. Los hombres y, cada vez más, las mujeres tenían un nuevo sentimiento de libertad; se convertían en amos de sus vidas: las cadenas feudales hablan sido rotas y el individuo podía hacer lo que deseara, libre de toda traba, o así lo creía la gente. Aunque esto sólo era verdadero en relación con la clase alta y la media, sus logros podían hacer que los demás tuvieran fe en que posteriormente la nueva libertad llegaría a extenderse a todos los miembros de la sociedad, siempre que la industrialización continuara progresando. El socialismo y el comunismo rápidamente cambiaron, de movimientos cuya meta era una nueva sociedad y un nuevo hombre en movimientos cuyo ideal era ofrecer a todos una vida burguesa, una burguesía universalizada para los hombres y las mujeres del futuro. Se suponía que lograr riquezas y comodidades para todos se traduciría en una felicidad sin limites para todos. La trinidad "Producción ilimitada, libertad absoluta y felicidad sin restricciones" formaba el núcleo de una nueva religión: el Progreso, y una nueva Ciudad Terrenal del Progreso remplazaría a la Ciudad de Dios. No es extraño que esta nueva religión infundiera energías, vitalidad y esperanzas a sus creyentes. Lo grandioso de la Gran Promesa, los maravillosos logros materiales e intelectuales de la época industrial deben concebirse claramente para poder comprender el trauma que produce hoy día considerar su fracaso. La época industrial no ha podido cumplir su Gran Promesa, y cada vez más personas se dan cuenta de lo siguiente: o La satisfacción ilimitada de los deseos no produce bienestar, no es el camino de la felicidad ni aun del placer máximo. o El sueño de ser los amos independientes de nuestras vidas terminó cuando empezamos a comprender que todos éramos engranes de una máquina burocrática, y que nuestros pensamientos, sentimientos y gustos los manipulaban el gobierno, los industriales y los medios de comunicación para las masas que ellos controlan. o El progreso económico ha seguido limitado a las naciones ricas, y el abismo entre los países ricos y los pobres se agranda. o El progreso técnico ha creado peligros ecológicos y de guerra nuclear; ambos pueden terminar con la civilización, y quizás con toda la vida. Cuando fue a Oslo a recibir el Premio Nóbel de la Paz (1952), Albert Schweitzer desafió al mundo "a atreverse a enfrentar la situación... El hombre se ha convertido en un superhombre.., pero el superhombre con su poder sobrehumano no ha alcanzado el nivel de la razón sobrehumana. En la medida en que su poder aumente se convertirá cada vez más en un pobre hombre... Debe despertar nuestra conciencia el hecho de que todos nos volvemos más inhumanos a medida que nos convertimos en superhombre". ______________________________________________________________________ En próximos post, voy a ir copiando los puntos siguientes de la Introducción, que son: ¿POR QUÉ FRACASÓ LA GRAN PROMESA? LA NECESIDAD ECONÓMICA DE UN CAMBIO HUMANO y ¿HAY UNA ALTERNATTVA PARA EVITAR LA CATÁSTROFE? | |
| | | Pur V.I.P.
Mensajes : 42595 Localización : remota
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Mar Oct 22, 2013 11:07 pm | |
| ¿POR QUÉ FRACASÓ LA GRAN PROMESA?
El fracaso de la Gran Promesa, además de las contradicciones económicas esenciales del industrialismo, surgió junto con el sistema industrial debido a sus dos principales premisas psicológicas: 1) La meta de la vida es la felicidad; esto es, el máximo de placer, que se define como la satisfacción de todo deseo o necesidad subjetiva que una persona pueda tener (hedonismo radical); 2) El egotismo, el egoísmo y la avaricia, que el sistema necesita fomentar para funcionar, producen armonía y paz.
Es bien sabido que los ricos a través de la historia han practicado el hedonismo radical. Los que contaban con recursos ilimitados, como la élite de Roma, de las ciudades italianas del Renacimiento, y de Inglaterra y Francia en los siglos XVII y XIX trataron de encontrar un sentido a la vida en el placer ilimitado; pero aunque el máximo placer (el hedonismo radical) fue el objetivo de ciertos grupos en determinadas épocas, con una sola excepción anterior al siglo XVII, la teoría del bienestar no fue sustentada por los grandes Maestros de la Vida en China, la India, el Cercano Oriente y Europa.
Esa cínica excepción es el filósofo griego Aristipo, discípulo de Sócrates (primera mitad del siglo IV a. de c.) quien enseñó que sentir el máximo placer corporal constituye la meta de la vida, y que la felicidad es la suma total de los placeres gozados. Lo poco que sabemos de este filósofo se lo debemos a Diógenes Laercio, pero basta para mostrar a Aristipo como el único hedonista real, para el que la existencia de un deseo era la base del derecho para satisfacerlo, y así conseguir la meta de la vida: el placer.
Epicuro difícilmente puede ser considerado un representante del tipo del hedonismo de Aristipo. Aunque para Epicuro el placer "pura' era la meta más elevada, para él este placer significaba .'ausencia de dolor" (aponia) y tranquilidad del alma (ataraxia). Según Epicuro, el placer que significa la satisfacción de un deseo no puede constituir la meta de la vida, porque este placer necesariamente es seguido por algo no placentero, y esto aparta a la humanidad de su meta real: la ausencia de dolor. (La teoría de Epicuro se semeja a la de Freud en muchos aspectos.) Sin embargo, parece que Epicuro representaba cierto tipo de subjetivismo opuesto al pensamiento de Aristóteles, hasta donde los contradictorios informes sobre la filosofía de Epicuro nos permiten hacer una interpretación.
Ninguno de los otros grandes maestros enseñó que la existencia real de un deseo constituyera una norma ética, sino que se interesaban por el bienestar óptimo de la humanidad (vivere benc). El elemento esencial de su pensamiento era la distinción entre aquellas necesidades (deseos) que sólo se sienten subjetivamente y cuya satisfacción produce un placer momentáneo, y las necesidades que están enraizadas en la naturaleza humana y cuya satisfacción fomenta el desarrollo humano y produce eudaimonia, o sea, "bienestar". En otras palabras, se preocupaban por distinguir entre las necesidades puramente subjetivas y las necesidades objetivamente válidas: la mayor parte de las primeras es dañosa para el desarrollo humano, y las segundas están en armonía con los requerimientos de la naturaleza humana.
La teoría de que la meta de la vida es satisfacer todos los deseos humanos fue francamente proclamada, por primera vez desde Aristipo, por los filósofos de los siglos XVII y XVIII. Este concepto pudo surgir fácilmente cuando "ganancia" dejó de significar "ganancia del alma" (como en la Biblia, y más tarde en Spinoza) y llegó a significar ganancia material, económica, en el periodo en que la clase media se libró no sólo de sus grilletes políticos, sino de todos los vínculos con el amor y con la solidaridad, y creyó que vivir sólo para uno mismo significaba ser más y no menos. Hobbes consideraba que la felicidad es el progreso continuo de una codicia (cupiditas); La Mettrie hasta recomendaba las drogas, que por lo menos ofrecían la ilusión de la felicidad; para Sade la satisfacción de los impulsos crueles era legítima, precisamente porque existían y debían ser satisfechos. Estos pensadores vivieron en la época de la victoria final de la clase burguesa. La que había sido práctica no filosófica de los aristócratas se convirtió en práctica y teoría de la burguesía.
Desde el siglo XVIII se han desarrollado muchas teorías éticas: algunas fueron formas más respetables del hedonismo, como el utilitarismo; otras fueron sistemas estrictamente antihedonistas, como los de Kant, Marx, Thoreau y Schweitzer. Sin embargo, en la época actual, en general desde el fin de la primera Guerra Mundial, se ha regresado a la práctica y a la teoría del hedonismo radical. El concepto de un placer ilimitado forma una extraña contradicción con el ideal de un trabajo disciplinado, similar a la contradicción entre la aceptación de la ética de un trabajo obsesivo y el ideal de pereza completa durante el resto del día y las vacaciones. Por una parte, la línea de ensamble interminable y la rutina burocrática, y por otra, la televisión, el auto y el sexo, forman una combinación contradictoria. El trabajo obsesivo produce la locura, tanto como la pereza completa, pero con esta combinación se puede vivir.
Además, ambas actitudes contradictorias corresponden a una necesidad económica: el capitalismo del siglo XX se basa en el consumo de bienes y el uso de servicios al máximo, y también en el rutinario trabajo de conjunto. Las consideraciones teóricas demuestran que el hedonismo radical no puede conducir a la felicidad, y explican por qué no puede hacerlo, dada la naturaleza humana, pero aun su un análisis teórico, los datos disponibles muestran muy claramente que nuestra "boum de la felicidad" no produce bienestar. En nuestra sociedad somos claramente infelices: solitarios, angustiados, deprimidos, destructivos y dependientes: nos alegramos cuando podemos matar el tiempo que hemos ahorrado con tanto trabajo.
Hemos realizado el experimento social más grande para contestar a la pregunta: el placer (como experiencia pasiva opuesta al amor, el bienestar y la alegría activos) ¿puede ser una respuesta satisfactoria al problema de la existencia humana? Por primera vez en la historia la satisfacción del impulso del placer no sólo es privilegio de una minoría, sino que es factible para más de la mitad de la población. El experimento ya ha contestado la pregunta en forma negativa.
La segunda premisa psicológica de la época industrial (satisfacer el egoísmo individual produce armonía y paz, y se traduce en bienestar para todos) es igualmente errónea en el terreno teórico, y su falacia se demuestra con los datos observables. ¿Por qué es verdadero este principio, que sólo rechazó uno de los grandes economistas clásicos, David Ricardo? El egoísmo se relaciona no sólo con mi conducta, sino con mi carácter. Significa que lo deseo todo para mí; que poseer y no compartir me da placer; que debo ser avaro, porque mi meta es tener, y que más soy cuanto más tengo; que debo sentir antagonismo a todos mis semejantes: a mis dientes a los que deseo engañar, a mis competidores a los que deseo destruir, a mis obreros a los que deseo explotar. Nunca puedo quedar satisfecho, porque mis deseos no tienen límite; debo envidiar a los que tienen más, y temer a los que tienen menos; pero debo reprimir estos sentimientos para presentarme (ante los otros y ante mí mismo) como el individuo sonriente, sincero, amable que todos simulan ser.
La pasión de tener debe producir una guerra de clases interminable. La pretensión de los comunistas de que su sistema pondrá fin a la guerra de clases al suprimir las clases, es una ficción, porque su sistema se basa en el principio de un consumo ilimitado como meta de la vida. Mientras todo el mundo desee tener más, se formarán clases, habrá guerra de clases, habrá una guerra internacional. La avaricia y la paz se excluyen mutuamente.
El hedonismo radical y el egotismo ilimitado no habrían surgido como principios orientadores de la conducta económica, de no haber ocurrido un cambio radical en el siglo XVIII. En la sociedad medieval, como en muchas otras sociedades muy desarrolladas y también en las primitivas, la conducta económica estuvo determinada por los principios éticos. Por ello, para la teología escolástica, categorías económicas como el precio y la propiedad privada formaban parte de una teología moral. Reconocemos que los teólogos encontraron fórmulas para adaptar su código moral a las nuevas demandas económicas (por ejemplo, las condiciones puestas por Santo Tomás de Aquino al concepto de "precio justo"); sin embargo, la conducta económica continuaba siendo humana y, por consiguiente, estaba sujeta a los valores de la ética humanista. En varias etapas, el capitalismo del siglo XVIII efectuó un cambio radical: la conducta económica se separó de la ética y de los valores humanos. En realidad, se supuso que la máquina económica era una entidad autónoma, independiente de las necesidades y de la voluntad humanas. Era un sistema que funcionaba solo, y obedecía a sus propias leyes. El sufrimiento de los obreros y la quiebra de un número cada vez mayor de empresas pequeñas en bien del desarrollo de las empresas mayores era una necesidad económica que podía lamentarse, pero que debía aceptarse como resultado de una ley natural.
El desarrollo de este sistema económico ya no quedó determinado por la pregunta: ¿Que es bueno para el hombre?, sino la pregunta: ¿Qué es bueno para el desarrollo del sistema? Se trataba de ocultar lo enconado de este conflicto suponiendo que lo que era bueno para el desarrollo del sistema (o aun para una sola gran Empresa) también era bueno para la gente. Esta interpretación se, vio reforzada por una interpretación subsidiaria: que las cualidades mismas que el sistema requería de los seres humanos (egotismo, egoísmo y avaricia) eran innatas a la naturaleza humana; por ello, no sólo el sistema, sino la misma naturaleza humana las fomentaba; se suponía que las sociedades en que no existía el egotismo, el egoísmo y la avaricia, eran "primitivas", y sus habitantes eran como "niños". La gente se negó a reconocer que estos rasgos que habían dado el ser a la sociedad industrial no eran impulsos naturales, sino producto de las circunstancias sociales.
No es menos importante este factor: la relación de la gente con la naturaleza se volvió muy hostil. Por ser "caprichos de la naturaleza", que por las condiciones mismas de nuestra existencia estamos dentro de la naturaleza, y porque con el don de nuestra razón la trascendemos, hemos tratado de resolver nuestro problema existencial renunciando a la visión mesiánica de la armonía entre la humanidad y la naturaleza, y al conquistar a la naturaleza, al transformarla para nuestros fines, su conquista se ha convertido, cada vez más, en equivalente de destrucción. Nuestro espíritu hostil y de conquista nos ciega al hecho de que los recursos naturales tienen límites Y pueden agotarse, y que la naturaleza luchará contra la rapacidad humana.
La sociedad industrial desprecia la naturaleza, todas las cosas que no están hechas por máquinas, y los pueblos que no son fabricantes de máquinas (las razas no blancas, con las recientes excepciones de Japón y China). Hoy día la gente se siente atraída por los objetos mecánicos, por el poder de las máquinas, por lo que no tiene vida, y cada vez más por la destrucción. | |
| | | Pur V.I.P.
Mensajes : 42595 Localización : remota
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Mar Oct 22, 2013 11:18 pm | |
| LA NECESIDAD ECONÓMICA DE UN CAMBIO HUMANO
Hasta ahora, el argumento que hemos expuesto aquí dice que los rasgos de carácter engendrados por nuestro sistema socioeconómico, o por nuestra manera de vivir, son patógenos y a la larga enferman al individuo y, por consiguiente, a la sociedad. Sin embargo, hay un segundo argumento, desde un punto de vista enteramente distinto, en favor de procurar cambios psicológicos profundos en el Hombre como alternativa a una catástrofe económica y ecológica. Se encuentra en dos informes encargados por el Club de Roma, uno a D. H. Meadows et al, y otro a M. D. Mesarovic y E. Pestel (Los límites del crecimiento, FCE, 29 reimpresión, 1975, y La humanidad en la encrucijada, FCE, 1975). Ambos informes se refieren a las tendencias tecnológicas, económicas y demográficas en escala mundial. Mesarovic y Pestel concluyen que sólo unos cambios tecnológicos y económicos radicales de nivel mundial, que se apliquen según un plan maestro, pueden "evitar una catástrofe mundial definitiva". Los datos que ofrecen como prueba de su tesis se basan en la investigación más universal y sistemática realizada hasta ahora. (Su libro tiene ciertas ventajas metodológicas sobre el informe de Meadows; pero este estudio, anterior, exige cambios económicos más radicales aún como alternativa a una catástrofe.) Mesarovic y Pestel concluyen, además, que estos cambios económicos sólo son posibles "si ocurren cambios fundamentales de los valores y las actitudes del hombre (o, como yo los llamaría, de la orientación del carácter humano» como una nueva ética y una nueva actitud hacia la naturaleza" (las cursivas son mías). Lo que ellos dicen confirma lo que otros afirmaron antes y después de que su informe fue publicado: una nueva sociedad es posible sólo si, en el proceso de desarrollarla, también se forma un nuevo ser humano, o en términos más modestos, si ocurre un cambio fundamental de la estructura de carácter del Hombre contemporáneo.
Por desgracia, los dos informes fueron escritos con el espíritu cuantitativo, abstracto e impersonal tan característico de nuestra época. Además, descuidan completamente todos los factores políticos y sociales, sin los que no puede haber un plan realista. Sin embargo, presentan datos valiosos, y por primera vez se refieren a la situación económica de toda la especie humana, a sus posibilidades Y a sus peligros. Su conclusión (es necesaria una nueva ética v una nueva actitud hacia la naturaleza) resulta tanto más valiosa cuanto que es opuesta a sus premisas filosóficas.
En el otro extremo de la escala se encuentra E. F. Schumacher, quien también es economista, pero al mismo tiempo humanista radical. Su demanda de un cambio humano radical se basa en dos argumentos: nuestro actual orden social nos enferma; sufriremos una catástrofe económica a menos que cambiemos radicalmente nuestro sistema social.
La necesidad de un profundo cambio humano no sólo es una demanda ética o religiosa, ni sólo una demanda psicológica que impone la naturaleza patógena de nuestro actual carácter social, sino que también es una condición para que sobreviva la especie humana. Vivir correctamente ya no es sólo una demanda ética o religiosa. Por primera vez en la historia, la supervivencia física de la especie humana depende de un cambio radical del corazón humano. Sin embargo, esto sólo será posible hasta el grado en que ocurran grandes cambios sociales y económicos que le den al corazón humano la oportunidad de cambiar y el valor y la visión para lograrlo.
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| | | Pur V.I.P.
Mensajes : 42595 Localización : remota
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Mar Oct 22, 2013 11:26 pm | |
| ¿HAY UNA ALTERNATIVA PARA EVITAR LA CATÁSTROFE?
Todos los datos mencionados aquí han sido publicados y son bien conocidos. Lo casi increíble es que no se haya hecho un verdadero esfuerzo por evitar lo que parece un decreto final del destino. Aunque en la vida privada nadie, excepto un loco, permanecería pasivo ante una amenaza a su existencia, los encargados de los asuntos públicos prácticamente no hacen nada, y los que les han confiado su destino les permiten continuar inactivos.
¿Es posible que hayamos perdido el más fuerte de todos los instintos, el de conservación? Una de las explicaciones más obvias es que los gobernantes hacen muchas cosas que les permiten fingir que están actuando eficazmente para evitar una catástrofe: sus interminables conferencias, sus resoluciones y conversaciones sobre desarme causan la impresión de que los problemas se han identificado y que están haciendo algo para resolverlos. Sin embargo, no hacen nada realmente importante; pero gobernantes y Gobernados anestesian sus conciencias y su voluntad de sobrevivir, aparentando que conocen el camino y que avanzan en la dirección correcta.
Otra explicación es que el egoísmo que genera el sistema hace que los gobernantes antepongan su éxito personal a su responsabilidad social. Ya no nos sorprende cuando los dirigentes políticos y los "ejecutivos" de los negocios toman decisiones que parecen beneficiarlos, y que al mismo tiempo son nocivas y peligrosas para la comunidad. Desde luego, si el egoísmo es un pilar de la ética práctica contemporánea, ¿por qué habrían de actuar de otra manera? No parecen saber que la avaricia (como la sumisión) vuelve a la gente estúpida aun en lo que atañe a su verdadero interés, al interés de sus propias vidas y de las vidas de sus esposas y sus hijos (cf. J. Piaget, El juicio moral del niño). Al mismo tiempo, el público en general está tan egoístamente preocupado por sus asuntos particulares que presta muy poca atención a los problemas que trascienden el terreno personal.
Sin embargo, hay otra explicación más del debilitamiento de nuestro instinto de conservación: en la vida se requerirían cambios tan enormes que la gente prefiere una catástrofe futura al sacrificio que tendría que hacer hoy día. La descripción que hace Arthur Koestler de algo que le ocurrió durante la Guerra Civil Española es un ejemplo notable de esta actitud común: Koestler se encontraba en una cómoda quinta de un amigo cuando le informaron que avanzaban las tropas de Franco; sin duda llegarían durante la noche, y muy probablemente lo asesinarían; podía salvar su vida huyendo, pero la noche era fría y lluviosa, y la casa tibia y cómoda. Se quedó, fue hecho prisionero, y casi milagrosamente salvó su vida muchas semanas después gracias a los esfuerzos de algunos amigos periodistas. Así también se comportan los que prefieren arriesgarse a morir a soportar un examen que podría revelar una enfermedad grave, la cual requeriría una gran operación quirúrgica.
Además de esta explicación de la fatal pasividad humana en cuestiones de vida o muerte, hay otra, que es una de mis razones para escribir este libro. Me. refiero al concepto de que no tenemos otras alternativas que los modelos del capitalismo cooperativista, el socialismo socialdemócrata o soviético, o un fascismo (tecnocrático) con una cara sonriente". La difusión de este concepto se debe a que hemos hecho muy pocos esfuerzos por estudiar la posibilidad de crear modelos sociales enteramente nuevos y de experimentar con éstos. Desde luego, mientras los problemas de la reconstrucción social, aunque sólo sea parcialmente, no preocupen a nuestros mejores científicos y técnicos, nos faltará imaginación para crear alternativas nuevas y realistas.
El fin principal de este libro es analizar los dos modos básicos de la existencia: tener y ser. En el Capítulo I presento algunas observaciones "a primera vista" relativas a la diferencia entre estos dos modos. En el Capitulo II muestro la diferencia, tomando varios ejemplos de la vida diaria que los lectores fácilmente podrán relacionar con su experiencia personal. En el Capítulo III presento los modos de tener y de ser que aparecen en el Antiguo y en el Nuevo Testamento, y en los escritos del maestro Eckhart. En los capítulos siguientes me remito al problema más difícil: el análisis de la diferencia entre tener y ser, e intento sacar conclusiones teóricas basadas en datos empíricos. Hasta este punto, el libro trata principalmente de los aspectos individuales de los dos modos básicos de la existencia, pero en los capítulos finales me refiero a la importancia de estos modos en la formación de un Hombre Nuevo y de una Sociedad Nueva, y estudio las posibilidades de ofrecer alternativas al individuo enfermo y débil, y al catastrófico desarrollo socioeconómico del mundo. | |
| | | Pur V.I.P.
Mensajes : 42595 Localización : remota
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Mar Oct 22, 2013 11:30 pm | |
| Listo, ya me pueden dar el premio mayor al copiaypega Espero que les haya interesado, y que esta introducción sirva de disparador para el debate o para leer el libro o para putearme por pegar todo el chorro aquí mismo (es que es útil a la hora de citar algún fragmento si alguien está interesado). Voy a ver si busco y encuentro por Internet el libro que recomendó Pato, a ver si a medida que lo voy leyendo hago lo mismo (amen de compartir el enlace para su lectura online, de estar en pdf). Lo mismo invito a cualquiera que quiera hacer un aporte literario en ese sentido, sobre el tema del hilo. (Pd: no sé por qué dije que iba a pegar "fragmentos" si tenía idea de compartir la introducción completa ) | |
| | | Pur V.I.P.
Mensajes : 42595 Localización : remota
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Miér Oct 23, 2013 12:31 am | |
| - el.loco.lucas escribió:
- Os recomiendo un pequeño pero gran libro: "La economía del bien común" de Christian Felber. Una muy interesante propuesta para dejar de ser una sociedad al servicio de un sistema económico y pasar a tener un sistema económico al servicio de la sociedad.
Todavía no encuentro el libro pero veo que hay mucha info. Dejo este PDF que estoy leyendo que contiene un resumen con los 20 puntos más destacados de la propuesta de una Economía del Bien Común: [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]Página web del movimiento: economiadelbiencomun . orgEn otras entradas voy a ir tocando algunos puntos cuando los haya leído con más detenimiento (también las críticas, que las hay). | |
| | | Pur V.I.P.
Mensajes : 42595 Localización : remota
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Miér Oct 23, 2013 12:48 am | |
| mmm por Dios, la página donde estoy leyendo la crítica -incluyendo los comentarios de los lectores de esta página- es lo sumamente esperable; todo es liberalismo económico, y los comentarios son bien pedorros y de bajo nivel: la entrada se llama "antología de disparates de la Economía del Bien Común" (y el autor es un tal Rallo) [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] | |
| | | Tinajas Moderador
Mensajes : 41854 Localización : En cualquier parte del Universo
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Miér Oct 23, 2013 8:24 am | |
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| | | Tinajas Moderador
Mensajes : 41854 Localización : En cualquier parte del Universo
| Tema: Re: Por una economía con rostro humano Miér Oct 23, 2013 3:37 pm | |
| - Pur escribió:
- Tinajas escribió:
- Si, así es, se puede pensar en un reparto de las riquezas y combatir la pobreza, no necesariamente desde una ideología o el poder que la sustenta, sino desde nuestra propia creencia de solidaridad hacia los más desfavorecidos, sea de forma personal, colaborando con ONG, religiones o asociaciones de ayudas, y tengo claro que si las personas fueran generosas indistintamente de las ideas que tuvieran se podría forzar a cualquier gobierno a aplicar la justicia social y la economía humanista.
Viendo este video no pude más que pensar en este comentario tuyo A mí particularmente me hace ruido, no me gusta, pero es interesante y creo que tiene estrecha relación con tu idea de las cosas, planteada en este comentario.
"El cómo y el por qué del Altruismo Eficaz"
Yo entiendo la idea, tampoco me gusta mucho el video, todo se basa en el dinero y en el sistema que favorece estas desigualdades (ya sé que esto es ideológico, lo mismo que luchar por promover la Justicia Social) pero creo que somos las personas indistintamente de nuestras ideas, sino más bien el corazón, las que se mueven con generosidad y compromiso individual de altruismo, que se hace posible colaborando con ONG, aportando donaciones, implicándose socialmente para luchar por la erradicación de la pobreza y el sufrimiento por enfermedades en el mundo, uno tiene que estar concienciado del Ser humano en su conjunto, da igual que se ayude al Tíbet, o Somalia, y se sea de derechas o de izquierdas. En cuanto a Bill Gates, es como si yo salgo con 20 euros y le doy 1 euro a un pobre, se le ha ayudado sí, pero otras personas salen con 2 euros para desayunar y se lo dan al pobre también, la obra está bien por parte de los dos, el sacrificio y la conciencia por el sufrimiento ajeno lo tiene quien deja de tomar su café para que coma el pobre. | |
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| | | | Por una economía con rostro humano | |
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