Espe Aguirre, cazadora de talentos

En su día Espe se alejó de la dura política que la dejaba baldada al final de la jornada (lo de poner firmes a los subordinados y lanzar órdenes a lo ametralladora agota) y la ficharon de caza talentos de una empresa privada en el sector de recursos humanos, supongo que para que detectase a personas serviles y mindundis que dijesen sí, wana. Ayer salió a comunicar que se quedaba aterrorizada por haber elegido a Granados...La cuestión es que Espe elegía , querían a políticos honrados y ella no podía detectar que le engañaba incluso su más cercano colaborador, que cuando lo fichó por su talento y capacidades desconocía que el tipo en lo de hablar inglés había escrito sí y cuando hablaba con él sólo decía "Yes, jelou", y que cuando preguntó en la entrevista de trabajo a su número 2 por la honradez éste le respondiese ¿el qué? mientras distraía un boli de la mesa, aunque me dicen fuentes inverosímiles de contrastada seriedad que le hizo la prueba del billete, que consiste en dejar un billete a la vista del candidato, ausentarse de la sala y comprobar qué hacía con el dinero, lo que hizo Granados fue mangar billete, ordenador, bolígrafos ,cenicero y hasta la papelera . Como ella no tenía ninguna relación con su número 2 y nunca hablaban en fiestas, los pasillos de la Comunidad o en los despachos no podía saber cual era la personalidad de su mano derecha. A ella le bastaba con que le trajese el cafelito...plantear que estuviese al corriente imposible, ya que "descubrió lo de Gurtel" y es la última boy scout.  Hoy Espe está en crisis, sus poderes de selección están dañados, no sabe si poner cara de espanto y de horror, repetir que está engañada y ultrajada o exhibir una sonrisilla de ¿he sido yo? Ay, cazatalentos, te has lucido...

Que ojo, entre este y los alcaldes a los que no conocía se está luciende la supermegaconsultora.

Ella sabe lo que le interesa, sé que tiene mal ojo eligiendo si como dice el objetivo del PP es lo de eliminar la corrupción incompatible con su supuesta ideología.