No me extraña nada que Teresa de Calcuta fuera realmente lo que aquí se denuncia...; y me lo corrobora el que la Iglesia Católica la canonice. Canonizar la falsedad, es una de sus especialidades.
La hipocresía de los que critican antes el aborto que las ejecuciones, o que lo ponen a la altura de los asesinatos, son muy típicos entre los católicos fundamentalistas.