En pos del avance científico se han hecho muchísimas pruebas y experimentos que han tenido como cobayas a los animales. El ser humano, como especie dominante, se piensa con derecho a poder utilizarlos como conejillos de indias en sus experimentos, por si salen mal, que no haya bajas humanas.
Uno de los más escalofriantes jamás realizados es el que podemos ver en el vídeo a continuación. Unas imágenes realmente fuertes que no están recomendadas para aquellos demasiado sensibles, o para personas que sientan demasiado amor hacia los animales. Se trata de un experimento que los científicos rusos llevaron a cabo hace décadas con la cabeza de un perro.
Estos científicos trataban de probar que se podía mantener artificialmente con vida la cabeza de un animal a través de un aparato bastante simple que bombeara sangre, como si del propio corazón se tratase. Probaron con la cabeza de un perro conectada a este sistema, y el resultado fue ciertamente inquietante.
El animal respondía como si estuviera vivo, abriendo y cerrando los ojos, y sufriendo ante los estímulos externos, lo que demostraba que también tenía sensibilidad. Un experimento escalofriante que sin embargo pudo servir para avanzar en la ciencia en busca de unas mejores soluciones para nuestra salud.
Experimentos rusos-cabeza de un perro vivo sin cuerpo
