“Extremidades fantasma”
Una de las consecuencias menos placenteras del de por sí traumático evento de perder una extremidad es lo que los médicos denominan “extremidades fantasma”, y que ocurre cuando una persona comienza a sentir que la parte que perdió aún se encuentra allí.
Los médicos no se ponen de acuerdo en la causa del fenómeno, pero hasta el momento la evidencia parece indicar que se debe a terminaciones nerviosas defectuosas en lo que resta de aquella parte del cuerpo. Por su parte, algunos consideran que se trata en verdad de una reminiscencia de la extremidad que indica que en alguna parte de este mundo – o del otro – la extremidad sigue vinculada a la persona. Como si nuestra alma fuera una representación de nuestro cuerpo (o al menos estuviese atada a él, completo), las partes faltantes se convertirían en “trozos fantasma” con los que entraríamos en contacto de vez en cuando.
Aunque el fenómeno es común, y muchos no le echan demasiada cabeza, hay un caso en particular que resulta bastante interesante tanto por sus características como por sus implicaciones. Se trata del momento en que una persona pierde un ojo y comienza a “sentir” que este aún hace parte de él. Y así como las manos pueden sentir el aire, el agua u objetos sólidos, un ojo se caracteriza por ver.
Y muchas veces lo que ven estos ojos fantasma generaría más de un escalofrío.
Las alucinaciones de los “ojos fantasma”
Uno de los síntomas más comunes de cualquier miembro fantasma es el dolor. Además del sufrimiento de haber perdido una parte del cuerpo, muchas personas tienen que sufrir además la frustración de sentir un dolor que, saben, jamás serán capaces de evitar, pues proviene de una parte que ya no existe.
Sin embargo, en el caso de los ojos perdidos el dolor es un síntoma relativamente raro, que aparece en menos del 30% de las personas. En cambio, en este caso son comunes las alucinaciones y, ante todo, la aparición de sombras, formas y colores. Curiosamente, en el caso de la pérdida de la visa, sin que el ojo haya sido removido, las alucinaciones son muchísimo más detalladas aunque también menos comunes.
Pero lo más interesante no es esto. Es la aparición esporádica de lo que parecen ser individuos, en ocasiones ocultos en la sombra y cuya sola silueta los delata. De acuerdo con una encuesta realizado por la Universidad de Liverpool hasta un 60% de las personas afirmaba haber sentido este tipo de presencias, las cuales solían desaparecer una vez centraban su atención en ellas.
¿Visiones de otra dimensión?
Aunque los médicos no han dado explicación, muy seguramente se decanten por la salida más lógica desde su campo, esto es, la creación de ilusiones a partir de lo que el ojo alguna vez había visto. Sin embargo, muchos consideran que hay algo más metafísico en este fenómeno y que los ojos verdaderamente son capaces de mostrar a su dueño destellos del mundo en el que ahora se encuentran.
Y ¿qué hay allí? Según los relatos formas, colores… y personas. Y sobre todo, personas cuya identidad no está del todo clara.
Resulta demasiado fascinante la teoría de un mundo paralelo como para desecharla. ¿Podría ser esta una de las pruebas más contundentes sobre la existencia de un más – allá?
Fuente de imágenes: 1: t05.deviantart.net, 2: blogs.discovermagazine.com